Dark Chat

sábado, 5 de junio de 2010

Noches de Italia

Hello mis angeles hermosos !! buen fin de semana para todas aqui les dejo mas vicio por fiss dejen sus comentarios al final.
Mil besitos
Angel of the Dark
***********************************************************************************************************
Capitulo 12

Competencia

Confundido, el recién iniciado hijo de la noche se levantó.


-¡Mike! –exclamé con alegría.


-Espera –Edward me aprisionó en sus brazos, impidiéndome que corriera hacia mi amigo-. Es inestable.


-¿Bella? –el vampiro, con sus ojos rojos, me observó, por un momento creí ver el indicio de una sonrisa, pero el gesto murió cuando se fijó en quien me sostenía.


Jasper se fue acercando lentamente a Mike, lo estaba haciendo bien, mi amigo no le prestaba atención.


En el último paso estuvo el error. Mike se giró hacia Jasper y le gruñó, parecía bastante dispuesto a arrancarle la mano de una mordida si continuaba con su avance.


-Bella –repitió-. No entiendo ¿Qué está pasando? –se vio las manos como si fueran ajenas a él.


Sabía que me necesitaba, me sacudí las manos de Edward y me acerqué al ex-humano, quien me dirigió una sonrisa.


-¡Bella!


Ignoré la voz preocupada de Edward y llegué hasta un confundido Mike.


-Espera Ed, parece que ella lo calma –habló Jasper observando al recién iniciado con curiosidad.


Mike extendió los brazos, o eso fue lo que imaginé, porque antes de dar el último paso en su dirección, ya estaba bajo la prisión de su abrazo.


-No te he visto en mucho tiempo –ahora que prestaba más atención, su voz se escuchaba diferente, algo rasposa.


-¿Por qué se escucha así? –cuestioné a Jasper. Me inquietaba que algo estuviera mal con la transformación de mi recién recuperado amigo.


-Creo que es debido a la sed –contestó él.


-Oh –articulé-. Mike tienes que acompañarme, vamos a conseguirte algo de comida.


-¿Comida? –dijo confundido.


-Sí –levanté con dificultad mi cabeza, estaba demasiado apretada contra él como para moverme-. Todo va a estar más claro después que te alimentes.


-Tú no lo vas a llevar –intervino Julian, me pareció como si hablara después de años de estar callado.


-Tiene razón –dijo Edward entre dientes, no parecía hacerle mucha gracia estar de acuerdo con Julian-, deja que Jasper se encargue.


Mike lanzó una mirada asesina por encima de mi hombro, dejando claro cuál era su opinión a cerca de eso. Para hacer más firme su mensaje, me apretó más contra él, lo cual, gracias a la gran fuerza conferida por la transformación, me quitó la respiración.


-Mike –logré decir entre jadeos-, me duele.


Palabras que pronto supe, no debieron salir de mis labios.


-¡Suéltala! –ordenaron al unísono Edward y Julian. Ambos se habían acercado a nosotros y observaban a Mike con la misma expresión de rabia. Estaban tan coordinados que parecían formar buen equipo.


-Lo siento –Mike sólo se dirigió a mí cuando habló. Me liberó, pero al ver que los otros dos vampiros se acercaban más, me colocó detrás de él.


-Estoy bien –mascullé a la espalda de mi amigo-, él necesita calmar su sed, y parece más cómodo estando conmigo así que creo que lo mejor será que yo lo acompañe.


A pesar de la obstrucción, el mensaje pareció llegar sin interferencia.


Escuché unos gruñidos en respuesta.


-Es lo mejor –estuvo de acuerdo Jasper-. Aquí hay demasiada tensión.


Lo observé por un momento, él era quien más resentía todas las emociones, me pregunté si sería muy difícil para controlarlo.


-Iré con ustedes –dijo Edward con firmeza.


-Iremos –le corrigió Julian.


-No –gruñó Mike.


-¿No puedes hacer algo? –le pregunté con desesperación a Jasper. Me sentí mal porque era pedirle demasiado, pero la situación me estaba poniendo nerviosa.


Lo vi apretar la mandíbula y cerrar los ojos.


-Demasiadas emociones al mismo tiempo –dijo a través de labios apretados.


-Escuchen –hablé tras un momento. Me dirigí a Julian y a Edward-, iré con Mike, él no me hará daño, además se cuidarme… regresaremos pronto.


El silencio inundó el lugar, no sabía si significaba algo bueno o malo, así con una mirada discreta pedí una pequeña asesoría al vampiro empático.


Jasper asintió.


-Te esperaré –dijo Edward al fin.


-Yo también –agregó Julian.


Llegamos a un lugar apartado de la ciudad, fue muy difícil encontrar un camino lejos de la humanidad, pero a cada minuto que pasaba con él parecía regresar a ser el Mike de antes.


Encontramos un grupo de ciervos en la parte central del bosque, Mike logró capturar dos, no era lo mismo que la sangre humana, pero lograría mantenerlo tranquilo por un tiempo.


-¿Qué me está pasando? –preguntó después de percatarse de lo que había hecho.


-Eres un vampiro –le respondí con tranquilidad.


Mi amigo enmudeció por un largo rato, tanto, que había empezado a creer que le había ocurrido algo a su voz.


-El que me atacó fue un vampiro –dijo de pronto. El viento comenzó a jugar con sus cabellos y con los míos. La luz plateada caía sobre él, me fijé más atentamente en sus rasgos, había cambiado mucho, sus facciones casi se perdían en la perfección en la que se había convertido.


-Lo sé –dije-, pero tú no eres como él, tú no lastimas humanos, ni lo harás.


Me miró con sus ojos, rojos como la sangre de la que ahora era dependiente.


-¿Quién te hizo daño? –le pregunté conteniendo toda la ira que había en mí.


-Es confuso –contestó-, todo parece muy borroso.


-¿Recuerdas algo? –cuestioné.


-Sí –asintió-, cuando llegó otro vampiro, él que estaba en tú casa, me sacó de ahí.


-Julian


-También recuerdo lo que me dijo cuando me ayudó a salir –continuó-, dijo que no era común en él hacer actos heroicos, pero que lo hacía por ti.


Puse los ojos en blanco, a pesar de todo, le estaba muy agradecida a ese vampiro.


-¿Algo más? –insistí.


Negó con la cabeza y sus ojos volvieron a mí, parecían escrutar mi rostro.


-Los recuerdos que tengo cuando era… humano, son distintos, parecen muy borrosos –comentó-, comparándolos con lo que veo ahora, es todo tan claro…


-Sí, los vampiros…


-Te ves mucho más hermosa de cómo te recuerdo –me interrumpió.


-Oh –balbucí. En mis labios había muerto cualquier explicación que iba a darle.


-Siempre he estado enamorado de ti –soltó acerándose a mí.


-Mike acabas de convertirte… creo que estás confundido.


-¿Tú eres como yo? –preguntó ignorando mis últimas palabras.


-Sí


Vi como una sonrisa se dibujaba en su rostro.


-Pero…


Me tomó de las muñecas y me acercó a él, siendo humano hubiera sido muy sencillo apartarlo, ahora como vampiro… no tanto.


-¿Qué tal si regresamos? –musité-. Edward debe de estar preocupado.


Eso pareció funcionar, se alejó de mí y frunció el ceño.


-Tú novio –dijo.


-Sí –contesté.


Mike parecía estar con más energía, me retó a una carrera de regreso, ni siquiera me dio oportunidad para negarme, por supuesto perdí.


-Eres muy lenta –se rió, esperándome a pocos metros de la casa.


Le saqué la lengua.


-Bella –me detuvo por el brazo-, ahora que soy como tú, todo va a ser diferente, ahora se que tengo oportunidad contigo.


-Mike, yo estoy con Edward –le dije-, y esto no es una competencia.


Entré en la casa, feliz, extendí los brazos hacia el sexy vampiro de cabello cobrizo. Pero Julian me atrapó en el camino.


-Yo también te extrañé mi amor –lo escuché decir.


También fui consciente del gruñido que se escuchó a sus espaldas. Edward lo apartó bruscamente de mí.


Mike arqueó las cejas en mi dirección.


-¿Estás segura que esto no es…?


-No hables Mike –mascullé frustrada.


Logré convencer a Edward que lo mejor para Mike era regresar a su vida de antes. Tuvimos que buscar las lentillas adecuadas para cubrir el rubí en sus ojos, e inventar una historia para justificar sus días de ausencia.


En la Universidad, tenía que pasar gran parte del tiempo con mi amigo, para evitar que perdiera el control, porque cómo había dicho Jasper, él sólo se comportaba con normalidad cuando yo estaba cerca.


Algo que no le agradaba mucho a Edward, ni a Julian, que ahora pasaba más tiempo con nosotros, por dos razones: Una, él había salvado a mi amigo y se había ganado mi gratitud y amistad. Dos, con él podríamos averiguar dónde se encontraba el vampiro que había lastimado a Mike.


Ahora era un grupo de seis: Alice, Jasper, Mike, Julian, Edward y yo.


Un día, Edward me separó del grupo, y me llevó a una parte desierta de la Universidad.


-Jasper podrá controlar a Mike por un rato –me respondió cuando empecé a discutir.


Se sentó bajo la sombra de un árbol, tomó de mi mano y me jaló. Caí sobre sus piernas, me reí y apoyé la cabeza sobre su pecho.


Pero al parecer él tenía otra idea en mente, porque me tomó por la barbilla y acercó mi rostro al suyo.


-Por fin a solas –murmuró antes de besarme. Sus labios se movían contra los míos primero lentamente, luego cuando yo le correspondí aumentó su ferocidad.


Sus manos comenzaron a trazar un camino por mi espalda, me estremecí, una de ellas encontró una curva por mi cintura y llegó hasta mi cadera.


Yo no quise quedarme atrás. Mis manos, ansiosas por tocar su piel, comenzaron a deshacerse de varios botones de su camisa.


-Bella –dijo sobre mis labios. Mis dedos comenzaron a trazar figuras sobre su pecho desnudo.


Entonces, alguien carraspeó, fuerte y alto.


Me levanté de un salto, Edward a regañadientes hizo lo mismo.


-¿Ahora nos sigues? –cuestionó mi novio enojado.


Me giré para encontrarme con Julian, tenía los labios apretados y observaba a Edward con un profundo odio.


-No lo hago –contestó entre dientes-, y aunque fuera así, no te seguiría a ti, sino a ella.


Edward le mostró los dientes.


-Pero sólo vengo a decirte –se dirigió a mí-, que ya sé donde podemos encontrar al vampiro que hirió a tu amigo.




Chicas ya es el penultimo cap uno y mas y termina por fiss comenten....