CAPÍTULO XIV
BELLA POV
El juicio tenía mis nervios destrozados y casi no podía pensar con claridad, ver el video de James me partió el alma, él sabía desde el principio que moriría por mi y eso me hizo sentirme más culpable aún, lo había amado tanto y lo había perdido por culpa de Alex, lo perdí a él, a mi familia, mi libertad, mi identidad, perdí todo por su culpa, pero la vida quita y da, ahora la vida me daba amigos como nunca antes los tuve, eran leales y me querían bien, estaban a mi lado apoyándome, en cierto sentido me daba una familia, ya que la familia de Carlisle también me estaba apoyando y por último la vida me daba a Edward, lo amaba, me estaba dando un apoyo increíble, estaba a mi lado demostrándome con hechos lo mucho que le importaba, pero a pesar de todo aún me dolía mucho lo que me hizo y ya no le tenía la confianza de antes, quizás con el tiempo, pero ni de eso estoy segura.
Ahora mi vida debía concentrarse en que el juicio saliera como debía salir, o sea con Alex tras las rejas pagando todo el daño y los asesinatos que cometió, después de eso debía ver exclusivamente por mi, por mejorar, por verme nuevamente bien, con confianza en las personas.
Hoy se dictaba la sentencia, quedaban sólo minutos para recibir el veredicto y los Cullen y mis amigos estaban a mi lado esperando. Los miré uno a uno y me llenó de calidez verlos a mi lado apoyándome, entregándome las herramientas para sanar, para confiar nuevamente, miré a Edward y no pude evitar sentirme rara, es cierto que ha estado conmigo en este proceso, lo he necesitado y él ha estado para mi, estoico, firme, demostrándome cariño, amor, pero a pesar de necesitarlo tanto y de sentirme algo egoísta por tenerlo a mi lado no dejo de sentir la desconfianza, a veces pienso que ya he olvidado lo que me hizo, pero otras veces todo vuelve y me hiere cada vez más, se que está arrepentido sería una tonta si no lo percibiera, pero es tan difícil olvidar la humillación, el dolor de sentirte nuevamente un juguete, un propósito, tan poca cosa que cualquiera se siente con el derecho de pasarte a llevar, de maltratar tus emociones y sentimientos. La confianza estaba perdida al igual que yo, a veces no sabía qué pensar, qué sentir, realmente estoy muy, muy confundida.
Dieron el veredicto y todos estaban muy contentos, lo condenaron en todas las instancias.
Secuestro : 7 años
Tortura : 10 años
Asesinato (a mi familia) : 15 años
Asesinato en primer grado (James y Victoria) : 20 años
Chantaje y soborno : 5 años
Pedofilia : 15 años
Con esa condena no saldría vivo de la cárcel, además se le negó el derecho a fianza o de acortar la condena por buen comportamiento. Estaba hecho, se había hecho justicia, se había cerrado un proceso doloroso de mi vida, pero me dejaba un regusto amargo, haber perdido a tantas personas importantes en mi vida por esa maldita obsesión, haber perdido años aterrorizada, menguada por ese hombre que ahora me miraba como si yo fuera la luz de sus ojos, era un maldito enfermo que me había arruinado la vida y ni siquiera era capaz de entender el enorme daño que me había causado. Antes de que lo sacaran de la sala se había atrevido a querer hablar conmigo, imposible, nunca más podría volver a verlo, nunca más querría volver a saber de él, que se pudriera en el infierno.
Cuando lo estaban sacando tuve el tupé de gritar que siempre me amaría y que volveríamos a estar juntos, que nadie nos separaría. Edward me abrazó, me besó y se acercó a él, no se qué le dijo, pero Alex empezó a gritar y a tratar de soltarse de la custodia, me llamaba, me suplicaba que no lo olvidara.
No soporté más y le pedí a Carlisle que me sacara de allí inmediatamente y así lo hizo.
Ahora iba de regreso a Forks, el juez dictaminó que tendría que vivir con los Cullen hasta que cumpliera la mayoría de edad. No me quedaba de otra y la verdad es que no me gustaba nada, llevaba demasiado tiempo sola, mucho tiempo independiente como para adaptarme a una familia, es cierto que ellos se habían portado fenomenal conmigo, pero vivir con ellos, vivir con Edward era más de lo que podría soportar.
Cerré los ojos y traté de dormir y relajarme, pero me resultaba tan difícil, además Edward iba a mi lado y ya pasado todo el juicio me estaba incomodando su cercanía, cada vez estábamos más cerca del pueblo donde Edward me destrozó y a cada minuto que pasaba me costaba más dejar de lado lo que nos pasó y recordaba con total nitidez las burlas, las risas, lo que me hacían, después recordé a Edward cortejándome, siendo amigos, después novios y finalmente descubrir la verdad, me había utilizado, las burlas de Rosalie, la lástima de las personas pensaba eran mis amigos y me habían traicionado, mierda, ¿alguna vez podría olvidar lo que me hizo?, abrí un ojo y lo miré, estaba dormido a mi lado, con nuestras manos entrelazadas y no pude evitar sentir rabia, de ser tan débil y aceptarlo nuevamente en mi vida como ni nada hubiera pasado, me solté de su mano, era tan hermoso, pecadoramente hermoso, pero como el pecado debía huir de él, ese hombre no era para mi, no le tenía confianza y sin eso nada era real, lo amaba, pero no confiaba en él y apenas lleguemos tendría que poner distancia entre los dos, iba a ser muy difícil, ya que tendríamos que vivir juntos, pero de alguna manera lo alejaría de mi lado, lo haría por mi, necesitaba estar bien, reconstruirme y tratar de ser lo más normal que pudiera y Edward no sería más una fuente de dolor en mi vida.
A pesar de todo lo que estaba en mi cabeza dándome vuelta me quedé dormida y en ese estado me dejé llevar por los sueños y en ellos aparecía James tal y como lo recordaba, tal leal, tan fuerte, tan hermoso, tan….tan…lejos ¿por qué estaba tan lejos?. Caminaba por un bosque, pero siempre a la distancia, no lo podía alcanzar, lo llamaba, lo trataba de tocar y no podía, llegamos a un acantilado y allí lo pude alcanzar.
- James – dije con la respiración entrecortada
- mi niña, por fin puedo descansar
- ¿qué?, no, no puedes dejarme ahora que te encontré
- preciosa estás soñando, mi tiempo ya se acabó, sólo vine a despedirme y a decirte que siempre te cuidaré, siempre te amaré
- no James, no me dejes, te necesito, te necesito tanto, tú eres el único que no me hace daño, el único que me entiende, por favor no me dejes de nuevo
- mi niña no puedo, mi destino es este y el tuyo es vivir, ser feliz, brillar, reír
- No quiero, no quiero nada de eso, te quiero a ti James
- Bella debes olvidarme, debes ser feliz, darle una oportunidad al amor
- pero nadie me quiere, nadie me querrá como tú lo hiciste, ya ni se quién soy, estoy perdida, necesito tu ayuda, te necesito, te quiero tanto, no me pidas que te olvide porque eso nunca lo haré siempre serás importante en mi vida.
- te amo Bella, siempre te amé y siempre lo haré
- también te amo James, siempre lo haré
- se que siempre me amaste como amigo y siempre lo harás, pero ahora por fin sabes lo que es el verdadero amor, por fin descubriste ese sentimiento hermoso, lucha por él, lucha por salir adelante, siempre fuiste fuerte y saldrás victoriosa en todo lo que te propongas, ahora debo irme amor, se feliz, perdona y serás feliz
- No me dejes James, no estoy lista para dejarte, no me dejes. JAMES…JAMES, NO, NO ME DEJES
- Bella, despierta, por favor despierta – sentí a ¿Edward?, si Edward me abrazaba, había sido un sueño, lo había visto en sueños y no pude evitar seguir llorando abrazada a Edward, extrañaba tanto a James, siempre lo extrañaría, siempre lo querría.
- No sufras más Bella, por favor no llores más
- es que lo extraño tanto Edward, extraño tanto a James, después de mis padres era todo lo que tenía y ahora y ahora…
- ahora me tienes a mi, tienes a los chicos de la Push, tienes a mi familia, todos te queremos, todos te protegeremos de lo que sea necesario
- no es lo mismo, James murió por mi culpa, él debería estar vivo, ser feliz, yo debería estar muerta no él, no él
- shhhh, calla Bella, su destino era ese. El tuyo debe ser todavía escrito, por favor no sufras y recuerda a James como el hombre importante que fue en tu vida, el hombre al que amaste y al que amas más que a nada.
No podía decirle que a él lo amaba mucho más de lo que amé a James, la pena me embargaba, era verdad que extrañaba mucho a James, siempre sería mi mejor amigo, mi protector, mi amor, fue poco tiempo, pero si lo llegué a amar, no como amo a Edward pero si me enamoré de él.
No se cuanto tiempo estuve sollozando en los brazos de Edward y me lastimaba causarle dolor, por que lo estaba haciendo, se que Edward estaba sufriendo viéndome llorar por James, pero no lo podía evitar.
EDWARD POV
Me estaba muriendo, de verdad me estaba muriendo por dentro, escuchar a Bella llamar a James en sueños diciéndole que no la dejara, que lo extrañaba, que lo necesitaba, que lo amaba, fue como una puñalada en el corazón, yo sabía que ella aún lo amaba, pero escucharlo de sus labios era terriblemente doloroso. Cuando la desperté la abracé y la consolé y cada sollozo suyo me rompía más por dentro, nunca sería digno de la mujer en mis brazos, nunca sería lo suficientemente bueno como James para mi Bella.
Nuevamente se había quedado dormida y traté de pensar con claridad, ahora Bella viviría en mi casa, iba a ser difícil, Carlisle había hablado largo y tendido conmigo al respecto y me había dejado bien claro que tenía que darle espacio a Bella, él decía que Bella estaba muy vulnerable en estos momentos y por eso había aceptado mi cercanía, pero que seguramente cuando pasara el shock del juicio me alejaría y yo debía respetar su decisión, la había hecho sufrir y ella debía sanar las heridas, pero era tan difícil tratar de alejarme de ella, lo único que quería era besarla y que pudiera olvidar lo maldito que fui con ella, quizás era lo mejor para los dos, darnos tiempo, espacio, volver a conocernos y de a poco ganarme nuevamente su confianza y su amor, quizás nunca lo logre, quizás nunca me ame como lo hizo, pero yo nunca dejaría de amarla, nunca dejaría de esforzarme por ganarla nuevamente, nunca me daría por vencido, ella era mi felicidad, ella era mi todo.
Al llegar a casa Alice le mostró a Bella la que sería su habitación, habitación que estaría frente a la mía, la tentación tan cerca y tan lejos, por que a penas bajamos del avión Bella se alejó de mi lado y ahora ni me miraba, me dolía como un demonio, pero Carlisle ya me había advertido que eso podría pasar y a pesar de todo me hacía daño.
Bella se encerró en su habitación y yo fui a la mía, me recosté en la cama y recordé el juicio, lo enfermo que estaba ese hombre, lo obsesionado que estaba con Bella y lo salvaje que se volvió cuando antes de que se lo llevaran le dije que Bella viviría conmigo, que era mi mujer, que yo obtenía de ella lo que él tanto ambicionaba y nunca tendría, por supuesto no es cierto, pero me volví loco cuando el desgraciado empezó a gritar que la amaba, que estarían nuevamente juntos y nadie los separaría, maldito enfermo, ella era mía o lo sería cuando me perdonara y si lo hacía nunca más le haría daño, nunca cometería el mismo error, ella era mi luz y hasta que me perdonara estaría a ciegas esperando por ella.
Se había hecho de noche cuando sentí que suavemente golpeaba a la puerta y posteriormente abrieron. Era ella, mi Bella
- Edward debemos hablar
- Pasa Bella
- Edward lo que pasó en el juicio no cambia nada, me engañaste, me utilizaste y no te puedo perdonar, por lo menos no por el momento y me siento muy mal por necesitarte tanto mientras duró el juicio, pero…
- Lo se Bella y no te sientas mal, yo estuve a tu lado y siempre lo estaré cuando me necesites, no te sientas egoísta por eso, eres maravillosa y yo arruiné todo lo que teníamos, te amo, pero te entiendo, se que necesitas tiempo y espacio y yo no te molestaré, seré para ti lo que tú quieras, un amigo, un confidente, un completo extraño, lo que quieras
- Gracias Edward, no te odio y no te trataré como a un extraño, pero no somos amigos, nunca lo fuimos, así que cada uno por su lado como siempre debió ser
Bella me dio una leve sonrisa y salió de la habitación dejándome hundido en la miseria.
BELLA POV
Me sentía mal, muy mal, pero era necesario aclarar la situación con Edward y me mataba ser tan franca con él, podía ver el dolor en sus ojos al decirle que pondría distancia entre los dos, pero era necesario, era lo justo, debía cobrar fuerzas para todo lo que se me venía encima, ahora los medios de comunicación sabían mi ubicación y Carlisle ya me había avisado que varios periodistas estaban afuera de la casa esperando a entrevistarme con respecto al fallo del juicio, ya que al salir del juicio no di ninguna declaración, ahora tendría que quedarme encerrada en la casa hasta que se aburrieran y se marcharan, además la próxima semana debía viajar a encontrarme con el albacea de la fortuna que me heredó mi padre, además debía encontrarse con el director de la empresa, ya que él se estaba haciendo cargo de la empresa de su padre hasta que ella tuviera la mayoría de edad, pero de todas maneras debía rendirle cuentas ya que ella llevaba bastante tiempo sin verle, muchas cosas debía hacer y la verdad es que gustosa dejaba todo como estaba, todo en manos de otras personas, total el dinero no le faltaba y sabía que la empresa estaba bien dirigida, pero no podía zafarse de esa responsabilidad, por que cuando llegara a la mayoría de edad era ella la que debía manejar el negocio y para eso debía también empezar a prepararse.
Habían pasado tres días desde que llegó de nuevo a Forks y la relación con Edward era casi nula, se veían a diario en la casa y el colegio, se saludaban cordialmente, pero de ahí no pasaban aunque cada vez que lo veía no podía evitar desear besarlo hasta cansarse, pero no podía, ya no podía.
En el colegio las cosas fueron un poco más difíciles, ahora todos sabían quien era ella y ahora todos querían ser sus amigos, manada de superficiales, sus amigos seguían siendo los mismos, los periodistas por otro lado aún rondaban por la ciudad y cada vez que se acercaban ella les daba esquinazos, era realmente agotador ser ella en este momento, pero era el precio a pagar por ser ella.
Acababa de llegar a casa y estaban todos en el comedor cuando sonó el teléfono celular y me disculpé para contestar, no conocía el número.
- hola
- ¿Quién habla?
-¿ya te olvidaste de mi?
- Benjamín…
BELLA POV
El juicio tenía mis nervios destrozados y casi no podía pensar con claridad, ver el video de James me partió el alma, él sabía desde el principio que moriría por mi y eso me hizo sentirme más culpable aún, lo había amado tanto y lo había perdido por culpa de Alex, lo perdí a él, a mi familia, mi libertad, mi identidad, perdí todo por su culpa, pero la vida quita y da, ahora la vida me daba amigos como nunca antes los tuve, eran leales y me querían bien, estaban a mi lado apoyándome, en cierto sentido me daba una familia, ya que la familia de Carlisle también me estaba apoyando y por último la vida me daba a Edward, lo amaba, me estaba dando un apoyo increíble, estaba a mi lado demostrándome con hechos lo mucho que le importaba, pero a pesar de todo aún me dolía mucho lo que me hizo y ya no le tenía la confianza de antes, quizás con el tiempo, pero ni de eso estoy segura.
Ahora mi vida debía concentrarse en que el juicio saliera como debía salir, o sea con Alex tras las rejas pagando todo el daño y los asesinatos que cometió, después de eso debía ver exclusivamente por mi, por mejorar, por verme nuevamente bien, con confianza en las personas.
Hoy se dictaba la sentencia, quedaban sólo minutos para recibir el veredicto y los Cullen y mis amigos estaban a mi lado esperando. Los miré uno a uno y me llenó de calidez verlos a mi lado apoyándome, entregándome las herramientas para sanar, para confiar nuevamente, miré a Edward y no pude evitar sentirme rara, es cierto que ha estado conmigo en este proceso, lo he necesitado y él ha estado para mi, estoico, firme, demostrándome cariño, amor, pero a pesar de necesitarlo tanto y de sentirme algo egoísta por tenerlo a mi lado no dejo de sentir la desconfianza, a veces pienso que ya he olvidado lo que me hizo, pero otras veces todo vuelve y me hiere cada vez más, se que está arrepentido sería una tonta si no lo percibiera, pero es tan difícil olvidar la humillación, el dolor de sentirte nuevamente un juguete, un propósito, tan poca cosa que cualquiera se siente con el derecho de pasarte a llevar, de maltratar tus emociones y sentimientos. La confianza estaba perdida al igual que yo, a veces no sabía qué pensar, qué sentir, realmente estoy muy, muy confundida.
Dieron el veredicto y todos estaban muy contentos, lo condenaron en todas las instancias.
Secuestro : 7 años
Tortura : 10 años
Asesinato (a mi familia) : 15 años
Asesinato en primer grado (James y Victoria) : 20 años
Chantaje y soborno : 5 años
Pedofilia : 15 años
Con esa condena no saldría vivo de la cárcel, además se le negó el derecho a fianza o de acortar la condena por buen comportamiento. Estaba hecho, se había hecho justicia, se había cerrado un proceso doloroso de mi vida, pero me dejaba un regusto amargo, haber perdido a tantas personas importantes en mi vida por esa maldita obsesión, haber perdido años aterrorizada, menguada por ese hombre que ahora me miraba como si yo fuera la luz de sus ojos, era un maldito enfermo que me había arruinado la vida y ni siquiera era capaz de entender el enorme daño que me había causado. Antes de que lo sacaran de la sala se había atrevido a querer hablar conmigo, imposible, nunca más podría volver a verlo, nunca más querría volver a saber de él, que se pudriera en el infierno.
Cuando lo estaban sacando tuve el tupé de gritar que siempre me amaría y que volveríamos a estar juntos, que nadie nos separaría. Edward me abrazó, me besó y se acercó a él, no se qué le dijo, pero Alex empezó a gritar y a tratar de soltarse de la custodia, me llamaba, me suplicaba que no lo olvidara.
No soporté más y le pedí a Carlisle que me sacara de allí inmediatamente y así lo hizo.
Ahora iba de regreso a Forks, el juez dictaminó que tendría que vivir con los Cullen hasta que cumpliera la mayoría de edad. No me quedaba de otra y la verdad es que no me gustaba nada, llevaba demasiado tiempo sola, mucho tiempo independiente como para adaptarme a una familia, es cierto que ellos se habían portado fenomenal conmigo, pero vivir con ellos, vivir con Edward era más de lo que podría soportar.
Cerré los ojos y traté de dormir y relajarme, pero me resultaba tan difícil, además Edward iba a mi lado y ya pasado todo el juicio me estaba incomodando su cercanía, cada vez estábamos más cerca del pueblo donde Edward me destrozó y a cada minuto que pasaba me costaba más dejar de lado lo que nos pasó y recordaba con total nitidez las burlas, las risas, lo que me hacían, después recordé a Edward cortejándome, siendo amigos, después novios y finalmente descubrir la verdad, me había utilizado, las burlas de Rosalie, la lástima de las personas pensaba eran mis amigos y me habían traicionado, mierda, ¿alguna vez podría olvidar lo que me hizo?, abrí un ojo y lo miré, estaba dormido a mi lado, con nuestras manos entrelazadas y no pude evitar sentir rabia, de ser tan débil y aceptarlo nuevamente en mi vida como ni nada hubiera pasado, me solté de su mano, era tan hermoso, pecadoramente hermoso, pero como el pecado debía huir de él, ese hombre no era para mi, no le tenía confianza y sin eso nada era real, lo amaba, pero no confiaba en él y apenas lleguemos tendría que poner distancia entre los dos, iba a ser muy difícil, ya que tendríamos que vivir juntos, pero de alguna manera lo alejaría de mi lado, lo haría por mi, necesitaba estar bien, reconstruirme y tratar de ser lo más normal que pudiera y Edward no sería más una fuente de dolor en mi vida.
A pesar de todo lo que estaba en mi cabeza dándome vuelta me quedé dormida y en ese estado me dejé llevar por los sueños y en ellos aparecía James tal y como lo recordaba, tal leal, tan fuerte, tan hermoso, tan….tan…lejos ¿por qué estaba tan lejos?. Caminaba por un bosque, pero siempre a la distancia, no lo podía alcanzar, lo llamaba, lo trataba de tocar y no podía, llegamos a un acantilado y allí lo pude alcanzar.
- James – dije con la respiración entrecortada
- mi niña, por fin puedo descansar
- ¿qué?, no, no puedes dejarme ahora que te encontré
- preciosa estás soñando, mi tiempo ya se acabó, sólo vine a despedirme y a decirte que siempre te cuidaré, siempre te amaré
- no James, no me dejes, te necesito, te necesito tanto, tú eres el único que no me hace daño, el único que me entiende, por favor no me dejes de nuevo
- mi niña no puedo, mi destino es este y el tuyo es vivir, ser feliz, brillar, reír
- No quiero, no quiero nada de eso, te quiero a ti James
- Bella debes olvidarme, debes ser feliz, darle una oportunidad al amor
- pero nadie me quiere, nadie me querrá como tú lo hiciste, ya ni se quién soy, estoy perdida, necesito tu ayuda, te necesito, te quiero tanto, no me pidas que te olvide porque eso nunca lo haré siempre serás importante en mi vida.
- te amo Bella, siempre te amé y siempre lo haré
- también te amo James, siempre lo haré
- se que siempre me amaste como amigo y siempre lo harás, pero ahora por fin sabes lo que es el verdadero amor, por fin descubriste ese sentimiento hermoso, lucha por él, lucha por salir adelante, siempre fuiste fuerte y saldrás victoriosa en todo lo que te propongas, ahora debo irme amor, se feliz, perdona y serás feliz
- No me dejes James, no estoy lista para dejarte, no me dejes. JAMES…JAMES, NO, NO ME DEJES
- Bella, despierta, por favor despierta – sentí a ¿Edward?, si Edward me abrazaba, había sido un sueño, lo había visto en sueños y no pude evitar seguir llorando abrazada a Edward, extrañaba tanto a James, siempre lo extrañaría, siempre lo querría.
- No sufras más Bella, por favor no llores más
- es que lo extraño tanto Edward, extraño tanto a James, después de mis padres era todo lo que tenía y ahora y ahora…
- ahora me tienes a mi, tienes a los chicos de la Push, tienes a mi familia, todos te queremos, todos te protegeremos de lo que sea necesario
- no es lo mismo, James murió por mi culpa, él debería estar vivo, ser feliz, yo debería estar muerta no él, no él
- shhhh, calla Bella, su destino era ese. El tuyo debe ser todavía escrito, por favor no sufras y recuerda a James como el hombre importante que fue en tu vida, el hombre al que amaste y al que amas más que a nada.
No podía decirle que a él lo amaba mucho más de lo que amé a James, la pena me embargaba, era verdad que extrañaba mucho a James, siempre sería mi mejor amigo, mi protector, mi amor, fue poco tiempo, pero si lo llegué a amar, no como amo a Edward pero si me enamoré de él.
No se cuanto tiempo estuve sollozando en los brazos de Edward y me lastimaba causarle dolor, por que lo estaba haciendo, se que Edward estaba sufriendo viéndome llorar por James, pero no lo podía evitar.
EDWARD POV
Me estaba muriendo, de verdad me estaba muriendo por dentro, escuchar a Bella llamar a James en sueños diciéndole que no la dejara, que lo extrañaba, que lo necesitaba, que lo amaba, fue como una puñalada en el corazón, yo sabía que ella aún lo amaba, pero escucharlo de sus labios era terriblemente doloroso. Cuando la desperté la abracé y la consolé y cada sollozo suyo me rompía más por dentro, nunca sería digno de la mujer en mis brazos, nunca sería lo suficientemente bueno como James para mi Bella.
Nuevamente se había quedado dormida y traté de pensar con claridad, ahora Bella viviría en mi casa, iba a ser difícil, Carlisle había hablado largo y tendido conmigo al respecto y me había dejado bien claro que tenía que darle espacio a Bella, él decía que Bella estaba muy vulnerable en estos momentos y por eso había aceptado mi cercanía, pero que seguramente cuando pasara el shock del juicio me alejaría y yo debía respetar su decisión, la había hecho sufrir y ella debía sanar las heridas, pero era tan difícil tratar de alejarme de ella, lo único que quería era besarla y que pudiera olvidar lo maldito que fui con ella, quizás era lo mejor para los dos, darnos tiempo, espacio, volver a conocernos y de a poco ganarme nuevamente su confianza y su amor, quizás nunca lo logre, quizás nunca me ame como lo hizo, pero yo nunca dejaría de amarla, nunca dejaría de esforzarme por ganarla nuevamente, nunca me daría por vencido, ella era mi felicidad, ella era mi todo.
Al llegar a casa Alice le mostró a Bella la que sería su habitación, habitación que estaría frente a la mía, la tentación tan cerca y tan lejos, por que a penas bajamos del avión Bella se alejó de mi lado y ahora ni me miraba, me dolía como un demonio, pero Carlisle ya me había advertido que eso podría pasar y a pesar de todo me hacía daño.
Bella se encerró en su habitación y yo fui a la mía, me recosté en la cama y recordé el juicio, lo enfermo que estaba ese hombre, lo obsesionado que estaba con Bella y lo salvaje que se volvió cuando antes de que se lo llevaran le dije que Bella viviría conmigo, que era mi mujer, que yo obtenía de ella lo que él tanto ambicionaba y nunca tendría, por supuesto no es cierto, pero me volví loco cuando el desgraciado empezó a gritar que la amaba, que estarían nuevamente juntos y nadie los separaría, maldito enfermo, ella era mía o lo sería cuando me perdonara y si lo hacía nunca más le haría daño, nunca cometería el mismo error, ella era mi luz y hasta que me perdonara estaría a ciegas esperando por ella.
Se había hecho de noche cuando sentí que suavemente golpeaba a la puerta y posteriormente abrieron. Era ella, mi Bella
- Edward debemos hablar
- Pasa Bella
- Edward lo que pasó en el juicio no cambia nada, me engañaste, me utilizaste y no te puedo perdonar, por lo menos no por el momento y me siento muy mal por necesitarte tanto mientras duró el juicio, pero…
- Lo se Bella y no te sientas mal, yo estuve a tu lado y siempre lo estaré cuando me necesites, no te sientas egoísta por eso, eres maravillosa y yo arruiné todo lo que teníamos, te amo, pero te entiendo, se que necesitas tiempo y espacio y yo no te molestaré, seré para ti lo que tú quieras, un amigo, un confidente, un completo extraño, lo que quieras
- Gracias Edward, no te odio y no te trataré como a un extraño, pero no somos amigos, nunca lo fuimos, así que cada uno por su lado como siempre debió ser
Bella me dio una leve sonrisa y salió de la habitación dejándome hundido en la miseria.
BELLA POV
Me sentía mal, muy mal, pero era necesario aclarar la situación con Edward y me mataba ser tan franca con él, podía ver el dolor en sus ojos al decirle que pondría distancia entre los dos, pero era necesario, era lo justo, debía cobrar fuerzas para todo lo que se me venía encima, ahora los medios de comunicación sabían mi ubicación y Carlisle ya me había avisado que varios periodistas estaban afuera de la casa esperando a entrevistarme con respecto al fallo del juicio, ya que al salir del juicio no di ninguna declaración, ahora tendría que quedarme encerrada en la casa hasta que se aburrieran y se marcharan, además la próxima semana debía viajar a encontrarme con el albacea de la fortuna que me heredó mi padre, además debía encontrarse con el director de la empresa, ya que él se estaba haciendo cargo de la empresa de su padre hasta que ella tuviera la mayoría de edad, pero de todas maneras debía rendirle cuentas ya que ella llevaba bastante tiempo sin verle, muchas cosas debía hacer y la verdad es que gustosa dejaba todo como estaba, todo en manos de otras personas, total el dinero no le faltaba y sabía que la empresa estaba bien dirigida, pero no podía zafarse de esa responsabilidad, por que cuando llegara a la mayoría de edad era ella la que debía manejar el negocio y para eso debía también empezar a prepararse.
Habían pasado tres días desde que llegó de nuevo a Forks y la relación con Edward era casi nula, se veían a diario en la casa y el colegio, se saludaban cordialmente, pero de ahí no pasaban aunque cada vez que lo veía no podía evitar desear besarlo hasta cansarse, pero no podía, ya no podía.
En el colegio las cosas fueron un poco más difíciles, ahora todos sabían quien era ella y ahora todos querían ser sus amigos, manada de superficiales, sus amigos seguían siendo los mismos, los periodistas por otro lado aún rondaban por la ciudad y cada vez que se acercaban ella les daba esquinazos, era realmente agotador ser ella en este momento, pero era el precio a pagar por ser ella.
Acababa de llegar a casa y estaban todos en el comedor cuando sonó el teléfono celular y me disculpé para contestar, no conocía el número.
- hola
- ¿Quién habla?
-¿ya te olvidaste de mi?
- Benjamín…