CAPÍTULO X
BELLA POV
Ya habían pasado dos semanas desde el incidente con Cullen, cada día que pasaba me sentía peor, lo extrañaba tanto, se que soy tonta al sentirme así, pero el amor no desaparece de un día para otro y la verdad es que lo amo, tanto que duele, pero tengo que salir adelante y gracias a Dios tengo amigos que me están ayudando en este momento tan difícil que estoy atravesando, además no se me hace nada fácil si más encima tengo que aguantar que todos los días Edward me mande ramos de flores, chocolates, peluches, poemas, canciones dedicadas y un montón de porquerías más, tampoco ayuda el hecho de que todos los santos días me diga lo mucho que me ama, que está arrepentido, que lo perdone y que lo diga a viva voz cuando no lo quiero escuchar a solas, ¡maldición! Era tan insoportablemente…..tierno, ¿Qué?, no, yo no dije esa mierda, él no es tierno, es un asco de persona, un patán, una mierda, si eso una mierda.
A la semana de haberme separado de Edward fui a conversar con Tanya, necesitaba la opinión de una amiga, además con ella podía tratar el tema de la intimidad libremente y ella me ayudó mucho y además me retó mucho porque según ella le cree a Edward y me aconsejó que le diera una oportunidad, claro, yo le daría una oportunidad : que se fuera al puto infierno, esa era la oportunidad que le daría.
Tanya cada día me presionaba más para que asistiera para el aniversario del Pub, la verdad es que ya había descubierto su juego, ella quería que volviera a subirme a un escenario, me atraía la idea, pero hace tanto tiempo que no lo hago y me da temor que al hacerlo vuelvan las imágenes escalofriantes de ese desgraciado obligándome a cantar mientras él se masturbaba, no podría soportar que esas imágenes volvieran justo en el momento de estar en el escenario con tanta gente mirándome. Además me reconocerían, no las personas del pueblo, pero lo más seguro es que los artistas que Tanya había invitado y que habían confirmado su asistencia supieran quien era yo y no se si estaba preparada para resurgir a Isabella Swan de forma indefinida, porque una vez que se descubriera el pastel no habría forma de volverse atrás y para eso tenía que comunicarme con Jake, hace tiempo que no hablamos y quedamos de llamarnos ante cualquier duda
Después de hablar con Jake me quedé más tranquila, el caso seguía en investigación y ahora contaban con un testigo clave : Carlisle Cullen, gracias a mi lo habían localizado y pronto se pondrían en contacto con él para que testificara como médico y testigo, mierda cuando eso pasara ya no habría forma de que todos se enteraran quien era en realidad, Edward sabría su pasado, ese que deseaba olvidar a toda costa y del que nunca escaparía, Jake quería además que yo estuviera presente como parte acusadora y principal víctima y testigo, por ese lado no estaba tan tranquila, debería volver a ver a ese canalla, no estaba preparada para tenerlo cerca, escuchar su versión de los hechos y sobretodo no estaba preparada para estar presente cuando todos supieran a ciencia cierta qué es lo que había pasado cuando estuvo en cautiverio, no quería que le tuvieran pena, no quería sentirse nuevamente invadida por el temor que le infundía ese hombre, temor a perder nuevamente su libertad, temor a que supiera que ahora tenía nuevos amigos a los que pudiera hacerle daño para tenerla a su merced, no quería participar de ese juicio, pero sin ella no tenía caso procesarlo, seguramente le darían pocos años de condena y podría salir fajo fianza y quedar nuevamente libre para buscarla y capturarla nuevamente, no, tendría que sacar fuerzas de flaqueza y enfrentar este nuevo desafío, alzar nuevamente la barbilla orgullosa y darle pelea a ese monstruo, no volver a demostrar miedo, no demostrar ninguna emoción, pero para eso debía fortalecerse por dentro y por fuera y lo que le había hecho Edward debería servirle de estímulo para matar cualquier tipo de miedo y no dejar nunca más que ningún hombre la lastime, si, eso haría, el odio de Edward Cullen me sacaría adelante, sólo debía enfocarme en la verdad que sabía, Edward me había querido destruir con su odio y su desprecio y no lo había logrado y ahora ese desprecio me daría las fuerzas para enfrentarme a todo sin miedo, total qué mas me podían hacer para destruirme, nada, Edward había estado tan cerca, tan cerca de verme derrotada y llorosa y no le daría el gusto.
Me dirigí a uno de los agentes que me servían de sombra y le comuniqué que necesitaba ejercitarme y practicar lo que James me había enseñado, en un principio me miró como si fuera un bicho raro, pero le dije que si no aceptaba que se largara, no necesitaba niñeros y si no iban a servir para nada más mejor que se fueran, entre maldiciones aceptó y los entrenamientos empezaron, despejé la sala de la casa, total no recibía visitas, así que ahí pusimos los aparatos para entrenar.
En un principio había sido tonificante empezar a practicar, pero el puto agente llamado Peter se estaba desquitando por hacer de niñero y me estaba pateando el trasero
- Mierda – nuevamente estaba en el piso, el estúpido Peter me estaba dando una paliza
- Tienes la fuerza, sólo tienes que enfocar bien tu objetivo y concentrarte, ahora, ataca – carajo, nuevamente al piso
- Oh, la niñita no sabe luchar, ni siquiera defenderse de unos golpecitos suaves, seguramente Cullen dejó que lo golpearas por que sentía pena por lo que te hizo – ah no, sacar a maldito Cullen era muy mala idea, me levanté, adopté la postura de ataque y lo hice, lo ataque con precisión y una furia ciega, terminé derribándolo
- Ok, niña, para, para carajo, me vas a matar a golpes – ok, lo admito me desquité con el pobre Peter y le di más de lo que se esperaba
- Ok, ¿quién es ahora la niñita Peter?
- Jajajaja, eres fuerte niña, pero te falta disciplina y controlar las emociones, pero primero era necesario sacarlas para despertarte, de todas maneras te falta mucho para lograr un nivel avanzado, pero para defensa personal estás bastante bien, mejor diría yo, por ahora es todo, mañana seguimos
- Ok, gracias Peter
- Discúlpame tu Bella, no debí sacar a colación loo que te hizo el hijo de puta de Cullen, fue un golpe bajo
- No te preocupes, si eso me da las fuerzas para enfrentarme a todo lo que se me viene de algo que sirva lo que me hizo
- De todas maneras, no había tenido la ocasión de decirte que lamento mucho lo que estás pasando yo estimaba mucho a James y se lo que sentía por ti, pero debes dejar de culparte y debes salir adelante, vivir nuevamente, darle pelea a tu pasado para que logres un futuro mejor
- Oh por Dios, eras mejor callado y en las sombras – dije riendo y guiñándole un ojo para darle a entender que era una broma
- Jajajajaja, pequeña bruja ya verás en el entrenamiento de mañana
- Hasta luego niñera
- Hasta luego fierecilla
- Jajajajaja – me caía bien Peter, era más simpático que Collin el otro agente que se había dedicado a mirarnos seriamente mientras entrenábamos
Cuando se fueron me fui a bañar y por Dios estaba adolorida entera, Peter había pateado mi trasero.
Me estaba terminando de vestir cuando sonó el timbre, al abrir la puerta me encontré con Emmett en el umbral y me miraba con esos ojitos risueños
- ey hola Emmett ¿qué te trae por acá?
- Hola Annie, yo quería decirte que extraño mucho ser tu amigo, no comparto lo que te hizo Edward y tienes un amigo en mi
- Gracias Emmett - ¿por qué mierda no se iba? Ya dijo lo que quería decir
- Ehhh, ¿me invitas a pasar?
- Oh, lo siento, pero no, sabes que vivo sola y no me parece adecuado
- Edward siempre venía
- El era mi novio y no tengo por qué dar explicaciones, dijiste que eras mi amigo y no es de amigos cuestionar las decisiones
- Lo siento, soy un idiota, sabes que me gustas y yo…
- Ni te atrevas a decirlo Emmett, me ofendes si piensas que podría volver a salir con alguien en plan romántico, no soy una cualquiera y lo de Edward está muy reciente, además…
- Además aún lo amas ¿cierto?
- No es tu problema y si no sabes amarrar la lengua es mejor que no seamos ni siquiera amigos
- No, no, por favor perdóname, tienes razón, soy un bocota, ¿nos vemos en clases?
- Seguro
- Annie ¿te encuentras bien realmente?
- Me encuentro como la mierda Emmett, pero viva – bueno no tenía que mentirle a un amigo ¿cierto?, además Emmett me daba cierta confianza nunca se había comportado como los putos del colegio y ahora me brindaba su amistad, espero se conformara sólo con eso, no podía entregar nada, estaba vacía, Edward me había dejado muerta por dentro
Cuando desperté apenas podía verme, carajo, me dolía todo el cuerpo por el entrenamiento de ayer.
Cuando llegué al colegio Edward me miraba a la distancia, si había recibido sus malditas flores matutinas y como todos los días estas habían terminado en la basura. No hizo ningún movimiento para acercarse y lo agradecí internamente, no tenía hoy las fuerzas para enfrentarlo.
Más tarde me encontré con Jasper, la relación con él había mejorado en los últimos días, habíamos aclarado el problema, se lo debía por James y le había terminado por contar toda la verdad. Cuando le conté su mirada era de absoluta tristeza tanto por mi como por el final de James y comprendió que el caso se manejaba con absoluto hermetismo por parte de la policía, era un caso complicado y se habían encargado a la perfección que la noticia no se filtrara, al menos en los hechos reales para que no entorpeciera el proceso que pronto se realizaría, prometió estar a mi lado en el juicio y en todo momento en que lo necesitara, a veces me recordaba tanto a James, sobretodo cuando se las daba de súper héroe, pero yo cada día dejaba de ser la doncella en peligro y me sentía cada día con más fuerzas y notaba como de a poco iba recuperando a la antigua Bella y la Annie que acá conocían iba desapareciendo.
Cuando le comenté a Jasper los planes de Tanya se mostró bastante entusiasta, me alentaba a que resurgiera de una buena vez, pero seguía indecisa.
Iba a mis clases cuando me topé con la zorra de Rosalie
- ey freaki, que se siente ser nuevamente la perdedora
- dímelo tú, no pasas de ser la segundota
- ¿cómo dices?
- Eso mismo, siempre serás la segundota, a pesar de acostarte con Edward, él por los motivos que sea me sigue buscando, rogando que vuelva con él y a ti ni siquiera te mira, sólo fuiste un polvo de borrachos
- Cállate estúpida, puedo tener al hombre que quiera
- Jajajaja, no a todos, no tienes a Emmett y si yo me lo propongo nunca lo tendrás, ayer fue a ofrecerme nuevamente su "amistad" ¿entiendes?, él nunca te querrá porque eres mala y eres papel quemado por muchos hombres, estás tan usada y amargada que nadie te soporta – le dije destilando toda la rabia que tenía, me giré y la dejé sola llena de rabia, punto para mi.
Me alejé de esa víbora y entré a clases y como no, tenía que estar Cullen ahí sentado en mi mesa esperándome
- Hola Bella
- ¿qué quieres Cullen? Me duele la cabeza y no estoy de humor para tus idioteces
- Auch, no tienes que ser tan mala – dijo riéndose y por Dios se veía tan sexy
- No se que quieres y la verdad no me interesa, no tenemos nada pendiente, deberíamos hacer de cuenta que no nos conocemos
- No digas eso, te quiero tanto y te extraño
- No te atrevas a decir eso nunca más, me tienes harta ¿por qué no vas y te buscas alguna zorra para pasar el rato y me dejas en paz?
- No sigas con eso, sabes perfectamente que a la única que quiero eres tú, se que me porté como un patán, pero por favor dame una oportunidad, una sola y te juro que no te defraudaré
- No pidas milagros Cullen, además no siento ya nada por ti, mataste mis sentimientos y ni siquiera te quiero como amigo
- No digas mentiras Bella, me amas, pero estás dolida y lo entiendo, pero ¿crees que algún día podrás perdonarme?
- Quizás, pero ese día no estaré aquí para decírtelo personalmente
- ¿te irás? ¿cuándo?
- No lo se, pero eres ingenuo si crees que me quedaré en este pueblo viéndote todos los malditos días
- No te vayas, no me dejes, si quieres nunca más te hablo, pero por favor no me prives de tu presencia
- No seas cursi, eras mejor cuando eras un cabrón insufrible, ahora pareces un niño llorón y un blandengue
No me lo vi venir, en un par de segundos Edward me había agarrado de la nuca y sus labios devoraban los míos con urgencia, con necesidad, traté de zafarme de la situación, pero ¡qué diablos! El imbécil besaba como los dioses y mentiría si dijera que no había extrañado sus labios, Edward profundizó el beso y con la mano libre me apegó a su cuerpo rozando nuestros sexos indecorosamente, sin darme cuenta de lo que hacía pasé mis manos por su cuello atrayéndole más hacia mi, si eso era posible, joder, estaba en la gloria, perdida en sus caricias, en sus besos fogosos, en su erección rozándome cada vez más fuerte
- te necesito tanto pequeña, no sabes lo mucho que me haces falta – dijo una vez que soltó mis labios para tomar aire, aunque sus manos seguían acariciándome
- no, no sig….
- Sientes como me tienes ¿ah?, eso sólo lo logras tú, este cuerpo sólo responde al tuyo, te deseo tanto mi ángel, no me tortures más, te amo, te necesito ahora
- No – trataba por todos los medios de olvidar su boca en mi cuello y sus manos avariciosas recorriendo mi trasero
- No Edward, suéltame, sólo estás caliente y para eso sólo tienes que buscar a tus amiguitas
- No, mi necesidad va más allá de calentura, mi necesidad eres tú, no sabes lo mucho que estoy sufriendo tu indiferencia, nunca me había enamorado, pero ahora lo se y te necesito, siento que me quemo con solo mirarte, con olerte mi cuerpo despierta, con recordar tu cuerpo desnudo junto al mío siento que tiemblo de placer – decía mientras una mano la colaba debajo mis pantalones y tocaba mi coño
- Oh, Bella, estás tan húmeda pequeña, también me deseas, tanto como yo – carajo era verdad, estaba quemándome y necesitaba más, mucho más, pero no debía ceder, no podía
- No, déjame en paz Edward, no vuelvas a tocarme nunca más – lo empujé y salí corriendo como alma que lleva el diablo de la sala, corrí hasta salir del colegio
- ¿Qué pasa niña? – Collin estaba afuera del colegio y me atrapó en un abrazo
- Sácame de aquí por favor
- ¿te hicieron daño? Dímelo y le pateo el trasero ahora mismo ¿quién fue?
- Sólo sácame de aquí, no soporto estar más aquí
- Fue ese muchacho ¿cierto? Fue Cullen ¿qué te hizo? – preguntaba mientras me tomaba en brazos y me depositaba en el auto
- Soy yo, maldita sea soy yo, lo sigo amando y casi, casi caigo nuevamente – dije llorando más fuertemente
- Ah, es eso, bueno, no es fácil terminar una relación, los sentimientos no desaparecerán de un día para otro y además, bueno, emmm, eres joven y hormonal, es común…
- Pero yo nunca he sido así, ni siquiera con James, yo nunca con él….
- Amas a ese muchacho imbécil, no te reproches no todas las relaciones son iguales, no siempre sentirás lo mismo por uno u otro novio
- Gracias Collin, por sacarme de allí
- Será la última vez, no deberías seguir huyendo de nada, estás entrenando el cuerpo, quizás deberías entrenarte psicológicamente, debes ser fuerte lo que viene en el juicio es duro y debes estar preparada para revivir todo el horror que viviste y salir airosa y con la frente en alto.
- Lo se, gracias nuevamente
- De nada niña, de nada – dijo lo último sonriendo, nunca lo había visto reír, se veía más joven y apuesto
Al llegar a casa me cambié de ropa y estuve reflexionando lo que dijo Colin, tenía razón, debía enfrentarme a mis miedos y debía empezar en este mismo instante.
Prendí el reproductor de música y subí el volumen a máximo y me llené de las melodías que se reproducían, mentiría si dijera que estuvo todo color rosa, el dolor atenazó mi pecho, pero no me permití llorar, apreté los dientes y empecé a saltar en la cama como loca, no permitiría que algo que tanto había amado como la música me hiciera más daño, lo mismo debería hacer con Edward, no permitiría que e dañara más, lo amaba, lo deseaba, mierda como lo deseaba, pero era demasiado tarde.
Caí exhausta sobre la cama, apagué el reproductor y me dirigí a una sala a la que no había entrado nunca, una sala de música, acaricié los instrumentos musicales y lentamente me senté en el piano y toqué una pieza, pero me detuve antes de acabar, ya que las lágrimas surcaban mis mejillas y tocar claro de luna me llenaba de tristeza en estos momentos.
Tomé el celular y marqué, después de tres tonos una voz respondió
- Tanya, estoy lista, asistiré al aniversario del Pub, prepara todo Isabella Swan regresa con todo.
BELLA POV
Ya habían pasado dos semanas desde el incidente con Cullen, cada día que pasaba me sentía peor, lo extrañaba tanto, se que soy tonta al sentirme así, pero el amor no desaparece de un día para otro y la verdad es que lo amo, tanto que duele, pero tengo que salir adelante y gracias a Dios tengo amigos que me están ayudando en este momento tan difícil que estoy atravesando, además no se me hace nada fácil si más encima tengo que aguantar que todos los días Edward me mande ramos de flores, chocolates, peluches, poemas, canciones dedicadas y un montón de porquerías más, tampoco ayuda el hecho de que todos los santos días me diga lo mucho que me ama, que está arrepentido, que lo perdone y que lo diga a viva voz cuando no lo quiero escuchar a solas, ¡maldición! Era tan insoportablemente…..tierno, ¿Qué?, no, yo no dije esa mierda, él no es tierno, es un asco de persona, un patán, una mierda, si eso una mierda.
A la semana de haberme separado de Edward fui a conversar con Tanya, necesitaba la opinión de una amiga, además con ella podía tratar el tema de la intimidad libremente y ella me ayudó mucho y además me retó mucho porque según ella le cree a Edward y me aconsejó que le diera una oportunidad, claro, yo le daría una oportunidad : que se fuera al puto infierno, esa era la oportunidad que le daría.
Tanya cada día me presionaba más para que asistiera para el aniversario del Pub, la verdad es que ya había descubierto su juego, ella quería que volviera a subirme a un escenario, me atraía la idea, pero hace tanto tiempo que no lo hago y me da temor que al hacerlo vuelvan las imágenes escalofriantes de ese desgraciado obligándome a cantar mientras él se masturbaba, no podría soportar que esas imágenes volvieran justo en el momento de estar en el escenario con tanta gente mirándome. Además me reconocerían, no las personas del pueblo, pero lo más seguro es que los artistas que Tanya había invitado y que habían confirmado su asistencia supieran quien era yo y no se si estaba preparada para resurgir a Isabella Swan de forma indefinida, porque una vez que se descubriera el pastel no habría forma de volverse atrás y para eso tenía que comunicarme con Jake, hace tiempo que no hablamos y quedamos de llamarnos ante cualquier duda
Después de hablar con Jake me quedé más tranquila, el caso seguía en investigación y ahora contaban con un testigo clave : Carlisle Cullen, gracias a mi lo habían localizado y pronto se pondrían en contacto con él para que testificara como médico y testigo, mierda cuando eso pasara ya no habría forma de que todos se enteraran quien era en realidad, Edward sabría su pasado, ese que deseaba olvidar a toda costa y del que nunca escaparía, Jake quería además que yo estuviera presente como parte acusadora y principal víctima y testigo, por ese lado no estaba tan tranquila, debería volver a ver a ese canalla, no estaba preparada para tenerlo cerca, escuchar su versión de los hechos y sobretodo no estaba preparada para estar presente cuando todos supieran a ciencia cierta qué es lo que había pasado cuando estuvo en cautiverio, no quería que le tuvieran pena, no quería sentirse nuevamente invadida por el temor que le infundía ese hombre, temor a perder nuevamente su libertad, temor a que supiera que ahora tenía nuevos amigos a los que pudiera hacerle daño para tenerla a su merced, no quería participar de ese juicio, pero sin ella no tenía caso procesarlo, seguramente le darían pocos años de condena y podría salir fajo fianza y quedar nuevamente libre para buscarla y capturarla nuevamente, no, tendría que sacar fuerzas de flaqueza y enfrentar este nuevo desafío, alzar nuevamente la barbilla orgullosa y darle pelea a ese monstruo, no volver a demostrar miedo, no demostrar ninguna emoción, pero para eso debía fortalecerse por dentro y por fuera y lo que le había hecho Edward debería servirle de estímulo para matar cualquier tipo de miedo y no dejar nunca más que ningún hombre la lastime, si, eso haría, el odio de Edward Cullen me sacaría adelante, sólo debía enfocarme en la verdad que sabía, Edward me había querido destruir con su odio y su desprecio y no lo había logrado y ahora ese desprecio me daría las fuerzas para enfrentarme a todo sin miedo, total qué mas me podían hacer para destruirme, nada, Edward había estado tan cerca, tan cerca de verme derrotada y llorosa y no le daría el gusto.
Me dirigí a uno de los agentes que me servían de sombra y le comuniqué que necesitaba ejercitarme y practicar lo que James me había enseñado, en un principio me miró como si fuera un bicho raro, pero le dije que si no aceptaba que se largara, no necesitaba niñeros y si no iban a servir para nada más mejor que se fueran, entre maldiciones aceptó y los entrenamientos empezaron, despejé la sala de la casa, total no recibía visitas, así que ahí pusimos los aparatos para entrenar.
En un principio había sido tonificante empezar a practicar, pero el puto agente llamado Peter se estaba desquitando por hacer de niñero y me estaba pateando el trasero
- Mierda – nuevamente estaba en el piso, el estúpido Peter me estaba dando una paliza
- Tienes la fuerza, sólo tienes que enfocar bien tu objetivo y concentrarte, ahora, ataca – carajo, nuevamente al piso
- Oh, la niñita no sabe luchar, ni siquiera defenderse de unos golpecitos suaves, seguramente Cullen dejó que lo golpearas por que sentía pena por lo que te hizo – ah no, sacar a maldito Cullen era muy mala idea, me levanté, adopté la postura de ataque y lo hice, lo ataque con precisión y una furia ciega, terminé derribándolo
- Ok, niña, para, para carajo, me vas a matar a golpes – ok, lo admito me desquité con el pobre Peter y le di más de lo que se esperaba
- Ok, ¿quién es ahora la niñita Peter?
- Jajajaja, eres fuerte niña, pero te falta disciplina y controlar las emociones, pero primero era necesario sacarlas para despertarte, de todas maneras te falta mucho para lograr un nivel avanzado, pero para defensa personal estás bastante bien, mejor diría yo, por ahora es todo, mañana seguimos
- Ok, gracias Peter
- Discúlpame tu Bella, no debí sacar a colación loo que te hizo el hijo de puta de Cullen, fue un golpe bajo
- No te preocupes, si eso me da las fuerzas para enfrentarme a todo lo que se me viene de algo que sirva lo que me hizo
- De todas maneras, no había tenido la ocasión de decirte que lamento mucho lo que estás pasando yo estimaba mucho a James y se lo que sentía por ti, pero debes dejar de culparte y debes salir adelante, vivir nuevamente, darle pelea a tu pasado para que logres un futuro mejor
- Oh por Dios, eras mejor callado y en las sombras – dije riendo y guiñándole un ojo para darle a entender que era una broma
- Jajajajaja, pequeña bruja ya verás en el entrenamiento de mañana
- Hasta luego niñera
- Hasta luego fierecilla
- Jajajajaja – me caía bien Peter, era más simpático que Collin el otro agente que se había dedicado a mirarnos seriamente mientras entrenábamos
Cuando se fueron me fui a bañar y por Dios estaba adolorida entera, Peter había pateado mi trasero.
Me estaba terminando de vestir cuando sonó el timbre, al abrir la puerta me encontré con Emmett en el umbral y me miraba con esos ojitos risueños
- ey hola Emmett ¿qué te trae por acá?
- Hola Annie, yo quería decirte que extraño mucho ser tu amigo, no comparto lo que te hizo Edward y tienes un amigo en mi
- Gracias Emmett - ¿por qué mierda no se iba? Ya dijo lo que quería decir
- Ehhh, ¿me invitas a pasar?
- Oh, lo siento, pero no, sabes que vivo sola y no me parece adecuado
- Edward siempre venía
- El era mi novio y no tengo por qué dar explicaciones, dijiste que eras mi amigo y no es de amigos cuestionar las decisiones
- Lo siento, soy un idiota, sabes que me gustas y yo…
- Ni te atrevas a decirlo Emmett, me ofendes si piensas que podría volver a salir con alguien en plan romántico, no soy una cualquiera y lo de Edward está muy reciente, además…
- Además aún lo amas ¿cierto?
- No es tu problema y si no sabes amarrar la lengua es mejor que no seamos ni siquiera amigos
- No, no, por favor perdóname, tienes razón, soy un bocota, ¿nos vemos en clases?
- Seguro
- Annie ¿te encuentras bien realmente?
- Me encuentro como la mierda Emmett, pero viva – bueno no tenía que mentirle a un amigo ¿cierto?, además Emmett me daba cierta confianza nunca se había comportado como los putos del colegio y ahora me brindaba su amistad, espero se conformara sólo con eso, no podía entregar nada, estaba vacía, Edward me había dejado muerta por dentro
Cuando desperté apenas podía verme, carajo, me dolía todo el cuerpo por el entrenamiento de ayer.
Cuando llegué al colegio Edward me miraba a la distancia, si había recibido sus malditas flores matutinas y como todos los días estas habían terminado en la basura. No hizo ningún movimiento para acercarse y lo agradecí internamente, no tenía hoy las fuerzas para enfrentarlo.
Más tarde me encontré con Jasper, la relación con él había mejorado en los últimos días, habíamos aclarado el problema, se lo debía por James y le había terminado por contar toda la verdad. Cuando le conté su mirada era de absoluta tristeza tanto por mi como por el final de James y comprendió que el caso se manejaba con absoluto hermetismo por parte de la policía, era un caso complicado y se habían encargado a la perfección que la noticia no se filtrara, al menos en los hechos reales para que no entorpeciera el proceso que pronto se realizaría, prometió estar a mi lado en el juicio y en todo momento en que lo necesitara, a veces me recordaba tanto a James, sobretodo cuando se las daba de súper héroe, pero yo cada día dejaba de ser la doncella en peligro y me sentía cada día con más fuerzas y notaba como de a poco iba recuperando a la antigua Bella y la Annie que acá conocían iba desapareciendo.
Cuando le comenté a Jasper los planes de Tanya se mostró bastante entusiasta, me alentaba a que resurgiera de una buena vez, pero seguía indecisa.
Iba a mis clases cuando me topé con la zorra de Rosalie
- ey freaki, que se siente ser nuevamente la perdedora
- dímelo tú, no pasas de ser la segundota
- ¿cómo dices?
- Eso mismo, siempre serás la segundota, a pesar de acostarte con Edward, él por los motivos que sea me sigue buscando, rogando que vuelva con él y a ti ni siquiera te mira, sólo fuiste un polvo de borrachos
- Cállate estúpida, puedo tener al hombre que quiera
- Jajajaja, no a todos, no tienes a Emmett y si yo me lo propongo nunca lo tendrás, ayer fue a ofrecerme nuevamente su "amistad" ¿entiendes?, él nunca te querrá porque eres mala y eres papel quemado por muchos hombres, estás tan usada y amargada que nadie te soporta – le dije destilando toda la rabia que tenía, me giré y la dejé sola llena de rabia, punto para mi.
Me alejé de esa víbora y entré a clases y como no, tenía que estar Cullen ahí sentado en mi mesa esperándome
- Hola Bella
- ¿qué quieres Cullen? Me duele la cabeza y no estoy de humor para tus idioteces
- Auch, no tienes que ser tan mala – dijo riéndose y por Dios se veía tan sexy
- No se que quieres y la verdad no me interesa, no tenemos nada pendiente, deberíamos hacer de cuenta que no nos conocemos
- No digas eso, te quiero tanto y te extraño
- No te atrevas a decir eso nunca más, me tienes harta ¿por qué no vas y te buscas alguna zorra para pasar el rato y me dejas en paz?
- No sigas con eso, sabes perfectamente que a la única que quiero eres tú, se que me porté como un patán, pero por favor dame una oportunidad, una sola y te juro que no te defraudaré
- No pidas milagros Cullen, además no siento ya nada por ti, mataste mis sentimientos y ni siquiera te quiero como amigo
- No digas mentiras Bella, me amas, pero estás dolida y lo entiendo, pero ¿crees que algún día podrás perdonarme?
- Quizás, pero ese día no estaré aquí para decírtelo personalmente
- ¿te irás? ¿cuándo?
- No lo se, pero eres ingenuo si crees que me quedaré en este pueblo viéndote todos los malditos días
- No te vayas, no me dejes, si quieres nunca más te hablo, pero por favor no me prives de tu presencia
- No seas cursi, eras mejor cuando eras un cabrón insufrible, ahora pareces un niño llorón y un blandengue
No me lo vi venir, en un par de segundos Edward me había agarrado de la nuca y sus labios devoraban los míos con urgencia, con necesidad, traté de zafarme de la situación, pero ¡qué diablos! El imbécil besaba como los dioses y mentiría si dijera que no había extrañado sus labios, Edward profundizó el beso y con la mano libre me apegó a su cuerpo rozando nuestros sexos indecorosamente, sin darme cuenta de lo que hacía pasé mis manos por su cuello atrayéndole más hacia mi, si eso era posible, joder, estaba en la gloria, perdida en sus caricias, en sus besos fogosos, en su erección rozándome cada vez más fuerte
- te necesito tanto pequeña, no sabes lo mucho que me haces falta – dijo una vez que soltó mis labios para tomar aire, aunque sus manos seguían acariciándome
- no, no sig….
- Sientes como me tienes ¿ah?, eso sólo lo logras tú, este cuerpo sólo responde al tuyo, te deseo tanto mi ángel, no me tortures más, te amo, te necesito ahora
- No – trataba por todos los medios de olvidar su boca en mi cuello y sus manos avariciosas recorriendo mi trasero
- No Edward, suéltame, sólo estás caliente y para eso sólo tienes que buscar a tus amiguitas
- No, mi necesidad va más allá de calentura, mi necesidad eres tú, no sabes lo mucho que estoy sufriendo tu indiferencia, nunca me había enamorado, pero ahora lo se y te necesito, siento que me quemo con solo mirarte, con olerte mi cuerpo despierta, con recordar tu cuerpo desnudo junto al mío siento que tiemblo de placer – decía mientras una mano la colaba debajo mis pantalones y tocaba mi coño
- Oh, Bella, estás tan húmeda pequeña, también me deseas, tanto como yo – carajo era verdad, estaba quemándome y necesitaba más, mucho más, pero no debía ceder, no podía
- No, déjame en paz Edward, no vuelvas a tocarme nunca más – lo empujé y salí corriendo como alma que lleva el diablo de la sala, corrí hasta salir del colegio
- ¿Qué pasa niña? – Collin estaba afuera del colegio y me atrapó en un abrazo
- Sácame de aquí por favor
- ¿te hicieron daño? Dímelo y le pateo el trasero ahora mismo ¿quién fue?
- Sólo sácame de aquí, no soporto estar más aquí
- Fue ese muchacho ¿cierto? Fue Cullen ¿qué te hizo? – preguntaba mientras me tomaba en brazos y me depositaba en el auto
- Soy yo, maldita sea soy yo, lo sigo amando y casi, casi caigo nuevamente – dije llorando más fuertemente
- Ah, es eso, bueno, no es fácil terminar una relación, los sentimientos no desaparecerán de un día para otro y además, bueno, emmm, eres joven y hormonal, es común…
- Pero yo nunca he sido así, ni siquiera con James, yo nunca con él….
- Amas a ese muchacho imbécil, no te reproches no todas las relaciones son iguales, no siempre sentirás lo mismo por uno u otro novio
- Gracias Collin, por sacarme de allí
- Será la última vez, no deberías seguir huyendo de nada, estás entrenando el cuerpo, quizás deberías entrenarte psicológicamente, debes ser fuerte lo que viene en el juicio es duro y debes estar preparada para revivir todo el horror que viviste y salir airosa y con la frente en alto.
- Lo se, gracias nuevamente
- De nada niña, de nada – dijo lo último sonriendo, nunca lo había visto reír, se veía más joven y apuesto
Al llegar a casa me cambié de ropa y estuve reflexionando lo que dijo Colin, tenía razón, debía enfrentarme a mis miedos y debía empezar en este mismo instante.
Prendí el reproductor de música y subí el volumen a máximo y me llené de las melodías que se reproducían, mentiría si dijera que estuvo todo color rosa, el dolor atenazó mi pecho, pero no me permití llorar, apreté los dientes y empecé a saltar en la cama como loca, no permitiría que algo que tanto había amado como la música me hiciera más daño, lo mismo debería hacer con Edward, no permitiría que e dañara más, lo amaba, lo deseaba, mierda como lo deseaba, pero era demasiado tarde.
Caí exhausta sobre la cama, apagué el reproductor y me dirigí a una sala a la que no había entrado nunca, una sala de música, acaricié los instrumentos musicales y lentamente me senté en el piano y toqué una pieza, pero me detuve antes de acabar, ya que las lágrimas surcaban mis mejillas y tocar claro de luna me llenaba de tristeza en estos momentos.
Tomé el celular y marqué, después de tres tonos una voz respondió
- Tanya, estoy lista, asistiré al aniversario del Pub, prepara todo Isabella Swan regresa con todo.