Dark Chat

martes, 28 de septiembre de 2010

Mascara De Odio

Hello mis angeles hermosos!!aqui les dejo su dosis del dia de hoy por fiss dejen sus comentarios al final ya q este cap bien los vale son mas de 10 hojas de word, sean buenitas si
mil besitos
Angel of the dark.
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Cap.7: Edward Cullen

18 de Julio de 2007

Cruzamos el umbral de entrada de el acogedor restaurante. Intente tomarle la mano al fin de darle algo de intimidad al encuentro e intentando hacer que ella se adaptara a mi presencia.

Pero ella permanecia alejada a unos pasos de mi, en el momento en que intentaba que la dejara atras no se lo permiti, su mirada permanecia enterrada en sus pies como si temiera rompereselos a cada paso, si no estuviera seguro de que intentaba no hacerse notar en esa actitud, habria jurado que su intencion era admirar el movimiento en su manera de caminar.

Pero cuando entramos no tuvo mas remedio que levantar la mirada, seguramente lo mas cerca que habia estado de un sitio como este era en el cafe paris y, a su pesar, curiosidad reticente se dejaba ver en su rostro, esto me beneficiaba enormemente ya que necesitaba toda la ayuda posible y si este sitio hacia que se sintiera comoda en mi presencia, tanto mejor para mi.

Una mesera se nos acerco, cuando la mire y ella a mi se establecio esa conexion tipicamente sexual que solia darse entre las mujeres que yo deseaba y ellas a mi.

Su mirada estaba poblada de profundas y sensuales promesas que, de no hallarme en esta mision en la que estaba, habria respondido gustoso.

Pero no era el tiempo y debia guardarme mis impulsos sexuales para cuando Isabella no estuviera presente, podia prescindir de esta clara invitacion por el momento,

- - en que puedo servirle, señor?.- pregunto ella ignorando olimpicamente la presencia de Isabella Swan a mi lado.

En otra ocasion hubiera podido decirle exactamente en que me hubiera podido servir, pero supe que su actitud estaba afectando negativamente a la niña esta a mi lado, y eso me enfurecio ya que etaba desbaratando lo poco que habia podido lograr.

Antes de que a ella le diera tiempo de apararse le pase un brazo sobre los hombros y la acerque a mi hasta casi sentir la tibia temperatura de su delgado cuerpo.

- - queremos una mesa para dos - enfatice bastante en la ultima palabra para que fuera claro para las dos mujeres de la situacion.

- - sigan por aca por favor - dijo ella mirando Isabella de arriba a abajo, detecte cierto matiz de decepcion en su voz, como si no pudiera creer que estuviera gastando mi tiempo con algo tan insignificante.

Nos condujo a un rincon que se veia bastante romantico y en secreto lo agradeci, cuanto antes se afianzara la relacion mejor para mis proyectos.

Movi la silla cuando la mesera se retiro, a manera de caballerosidad, para que ella se sentara, ella me miro y luego poso su bolso en una de las sillas y se sento en la que le ofreci.

Aun a distancia pude ver que su tension en el cuerpo era evidente. La verdad no entendia por que estaba tan nerviosa-

- que te pasa?- le pregunte, no tenia la esperanza de que me contestara con sinceridad.

- n...nada – mentira. Pero ya lo habia visto venir. Abarco la mesa con sus ojos esquivando los mios que la buscaban pero ella me oculto su mirada con tenacidad

La evalue durante unos segundos, ella inspiro inconcientemente, sin saber que la estaba observando, suspuse que sus fuertes inhalaciones de aire se debian a un vano intento de obtener serguridad. Señalo, totalizando, la mesa con sumano pequeña y dijo

- gracias por invitarme...este lugar es...- lo abarco despues con la vista – es hermoso -

Estaba intentando conversar, no sabia si seguirle la corriente o quedarme callado a fin de que hallara su seguro, de hecho esta era la primera vez que no tenia idea alguna de como actuar frente a una mujer, en una cita.

Era un poco confuso.

Segui observandola intentando que, inutilmente , me mirara, a cambio de eso obtuve una panoramica de el nervioso movimiento de sus manos. Como no lo soporte mas decidi hablar con direccion, no me parecia que de otra manera fuera mejor.

- - ¿te sientes nerviosa por mi presencia? -

Ella dejo de mover las manos unos segundos, como si mi pregunta la hubiera alterado y supe que era asi.

- - no...claro que no...- Otra mentira, estaba resultando tan mentirosa como yo con la gran diferencia de que yo si sabia como hacerlo.

- - en ese caso, ¿puedo decirte algo?-

Otra vez se quedo paralizada, como si a cambio de lo que le iba a decir pensara que iba a decretar su sentencia de muerte

- - por supuesto - respondio

- no sera la ultima vez que nos veamos y lo sabes verdad?- ignorando sus manos ella me miro rapidamente y como pude atrape sus ojos chocolate en los mios. Por unos segundos lo pude hacer pero ella se retrajo rapidamente.

No hizo nada . "¿que es lo que eso significa?" luego ella hablo, pero me pregunto algo que no esperaba y que para la situacion estaba un poco fuera de contexto.

- ¿tienes una novia?-

Apenas esas palabras brotaron de su boca ella se sacudio un poco como si se arrepintiera enormemente de lo que habia dicho, seguramente pensaba que yo era un libertino incorregible, y aunque tenia razon no me beneficiaba que lo sospechara

- no – dije fulminantemente arrepintiendome un poco de mi tono cuando vi su estado de retraccion. era una tonta, y yo era un tonto tambien.

- lo siento...no debi preguntarte eso – su voz sonaba ansionsa y sumisa, y a disculpa tambien – solo queria...- no queria saber de sus deseos y preguntas inoportunas asi que hable

- no importa... no tengo a nadie...todavia- esperaba que captara el doble sentido de la frase - y tu?- le devolvi la pregunta tan seguro de que me la iba a constestar como que las vacas volaban - ¿tienes novio?-

Hice un repaso breve de el informe que habia leido sobre ella , durante su estancia en el orfanato habia tenido poco contacto con el entorno masculino

- no – nego ella - no tengo.

Se hizo silencio y supe que las cosas no estaban evolucionando tan bien como yo creia, algo en su expresion facial cambio subitamente como si estuviera acordandose de algo que no queria, como si recordarlo le produjera un hondo dolor, me sorprendio interpretar su reservada y extraña actitud de esa manera en que lo estaba haciendo.

Cuando pude verla bien me di cuenta de que puro y fisico terror teñia las facciones de su cara, en la poca distancia en la que nos encontrabamos pude ver tambien como su cuerpo temblaba, lo que no sabia era por que demonios lo hacia.

Repentinamente como su cambio de actitud ella se puso de pie pero no me miro directamente como si temiera haerlo.

Por la colilla de el ojo me di cuenta de que una o varias personas nos estaban mirando. Algo no andaba nada bien

- lo siento mucho - Dijo ella atropelladamente - pero creo que debo irme - tomo su bolso y apartando la silla con un movimiento brusco camino casi corriendo hacia la salida del restaurante.

Me puse de pie rapidamente y la segui antes de que ella pudiera escapar preguntandome una y otra vez que era lo que habia dicho para que ella reaccionara de esa manera.

Cuando la pude entrever me di cuernta de que estaba a punto de abordar un taxi, corri rapidamente y antes de que ella abriera la puerta, la cerre y le impedi subirse. Hice una señal al conductor quien de inmediato se retiro y luego la tome a ella del brazo.

Para lo que no estaba preparado era para la fuerza con la que se zafo de mi agarre.

- No me toques... - dijo ella en un susurro pero con la voz, al mismo tiempo, firme. Habia mucha mas vehemencia en su tono de la que crei que poseia, aparte mi mano levantandola lentamente en vista de que entendiera que no queria hacerle daño.

- que es lo que te pasa?- le pregunte intentando imprimir confidencia en mi tono esperando de antemano la decepcion, era demasiado cerrada.

Todo se habia dado cuando mencione la palabra novio y hasta este momento me percate, definitivamente iba a tener que leer con mayor detenimiento el informe que sobre ella habia hecho el abogado, a ver si podia ve detalles de ella que habia pasado por encima.

-no te acerques...- suplico ella cuando di medio paso para tomarle la mano - por favor...solo dejame ir.

Su modo de suplicar casi me hace ceder, parecia una posesa

- ¿que es lo que pasa? - volvi a preguntar con mas ahinco con la intencion de verme preocupado , y a la vez, y a pesar mio, sintiendo una grave curiosidad por todo eso.

Las manos de ella volaron a su cara y pense que iba a estallar en llanto, pero a cambio de ello se paso las manos por la frente y se detuvo en sus sienes las cuales comenzo a frotar con fuerza y lentamente. La mire por los minutos que pasaron sin que nada se moviera entre nosotros mas que sus propias manos, luego ella inspiro profundamente y yo veia como lentamente salia de su subita crisis existencial.

- -perdoname- dijo ella abriendo los ojos pero mirando a la nada. Aparto sus dedos de sus sienes. Alli donde estos habian estado la piel se hallaba roja y medianamente irritada – no se que me paso -

Ni yo tampoco, pero sabia que estaba mintiendo, algo habia encerrado en todo este show emocional y estaba dispuesto a averiguarlo, la palm ya me picaba en el bolsillo del pantalon esperando lista para llamrar al abogado y pedirle referencias mas extensas del orfanato en cuestion.

Era imprescindible pedirle mas informacion sobre "la heredera"

- ¿que es lo que debo hacer para convencerte de que no te hare daño? - le pregunte cuando sus ojos, ahora normales, volvieron a cruzarse fugazmente con los mios, por un momento no pude dejar de verla como una niña muy crecida y lastimada y como siempre no senti nada.

- no eres tu...- dijo ella – soy yo...pero... – pude ver como tragaba saliva para dar claridad a su voz pero aun asi sonaba como una voz a la que alguien no ha usado en mucho tiempo – ya no importa...-

Por ultima vez se paso las manos por la cara luego se acomodo los cabellos en un gesto inconciente .

- lo siento - volvio disculparse - volvamos adentro...y olvidemonos...de esto...

Me soprendio un poco la entereza con la que asumio ese humillante momento de debilidad, no sabia que situacion la habia llevado alli, pero no se trataba de histeria convencional, no era como las cientos de amantes que tuve antes que gritaban en el momento en que decidia prescindir de ellas.

Si ella queria volver dentro era por que queria confiar, pero aun no se atrevia. Me esperaba un largo camino por delante.

Ella camino decidida hacia la puerta pero en esta ocasión la cogi de la muñeca , ella se volvio un poco, aunque no estaba prestandole demasiada atencion mis dedos no pudieron dejar de notar que tenia una tez mucho mas suave que la mayoria de las mujeres con las que habia estado, su muñeca se estremecio un poco y se volvio a mirarme, solo que no me miraba a mi sino a algun punto situado por encima de mi cabeza.

- no quiero que te hagas una imagen equivocada de que es lo que quiero contigo Isabella – baje mi voz hasta cierto punto para darle algo de sensualidad a la situacion y tratar de escaparla de lo que habia sucedido antes.

Ella intento apartar su mano con menos notoriedad pero sin éxito alguno, no queria asustarla pero que estuvieramos cerca en el momento de mi actuacion era vital para darle credibilidad

- no entiendo . - dijo ella pero algo me decia que si lo entendia, al menos lo basico, me parecia algo extraño que no entendira de frases ni indirectas relacionadas con el sexo o las relaciones, asi que tendria que explicarselo, esto de la instrucción iba a resultar bastante aburridor.

- vamos adentro y comamos, necesitamos hablar, esta es la razon por la que estamos aquí

Tenia planeado actuar de un modo poco menos sutil pero en vista de lo sucedido debia intentar abordar nuestra relacion con mas lentitud, al menos a la lentitud normal que esperaaba dirigir, tampoco me iba a andar como las tortugas, no tenia demasiado tiempo.

Aun con mi mano sujetando su muñeca volvimos a acomodarnos en nuesro sitio, la gente volvio las cabezas para mirarnos y vernos entrar, seguramente pensaban que se trataba de una pareja comun que arreglaba los problemas despues de un ardoroso beso.

Un mesero, esta vez hombre para satisfaccion de mis propositos se acerco a tomarnos la orden en cuanto recuperamos la mesa, nos ofrecio a ambos la carta y ella la ojeo algo nerviosa, aun tenia el pulso temblando y me pude dar cuenta por la carta, luego me pregunte que tan atento a ella debia haber estado para darme cuenta de ese particular detalle.

Ella señalo con el dedo lo que queria y para mi agrado personal se inclino hacia mi un poco para mostrarme lo que habia elegido, un pavo a la naranja.

- pavo a la naranja? - la anime - es un buen plato -

- lo se – dijo ella en voz baja – lo preparaba mucho cuando...- se callo antes de revelarme mas detalles, no la presione, no lo necesitaba. -

- - esta bien. Tomare lo mismo - indique al mesero que anoto en su libretilla de cuero

Adjunte al pedido una botella de vino blanco

- excelente eleccion, señor – dijo el mesero antes de retirarse

Suspirando apoye mi espalda en la silla y sin que ella se percatra observe nuevamente el juego nervioso de sus manos que se movian nerviosas una con otra, era toda una actitud que parecia algo exasperante. Ocultando mi humor nuevamente abri mi boca para habar.

- ponen una musica excelente – comente, y era cierto.

Ella se demoro en contestar pero luego dijo

- vienes con frecuencua? - me parecio captar un sentido oculto en su pregunta y pense que aun dudaba de mi "inocencia"-

- solo cuando quiero estar solo – dije, para mi sorpresa ella serio un poco

- entonces cual es el sentido de que yo este aquí ? - sus ojos estaba pegados a la mesa como si esta contuviera encima dibujos espectaculares a los cuales resultara imposible quitarles la vista. -

- solo cuando quiero estar solo...con alguien . - la sonrisa desparecio de su boca, luego añadi antes de que ella pudiera hablar – ¿por que casi nunca me miras cuando te hablo? -

Ella solto un respingo pero no consegui hacer que me mirara -

- no lo se...- acepto

- no importa- Dije yo un poco contrariado – al menos yo si puedo mirarte...- baje mi voz para que solo ella me pudiera escuchar

Pero luego continuamos en silencio hasta que el humenate platillo estuvo frente a nosotros con el frio vino .

Sin pedirle permiso el mesero descorcho la botella y sirvio un poco en la copa de cada uno . La inste con un gesto de la mano a que lo probara aunque no sabia que experiencia debia tener con los vinos. Para mi consternacion tomo la copa con toda la clase y distincion de las perras frigidas a las que estaba acostumbrado a tratar. Sabia como tomar una copa, dio un ligero sorbito, parecio gustarle, pero no le iba a preguntar, al menos no ahora.

- es...delicioso- dijo ella sonriendo, debia admitir que tenia una bonita dentadura.

Bebi un poco del mio y luego nos dedicamos a comer, me fije, sin esperar que ella se diera cuenta, en su manera de manejar los alimentos y los cubiertos, lo hacia bien, supe que me iba a ahorrar muchas mas clases de etica.

No sabia que posibilidades de educacion en la mesa ofrecia un orfanato pero estaba bastante complacido.

Antes de realmente terminar aparte los cubiertos a un lado del plato y la mire una vez mas buscando sus ojos.

- hay algo que debo decirte.

El poco de vino quie estaba probando en el momento en que dije esto se le fue por el lado incorrecto de la garganta. Tosio sonoramente por unos momentos.

- amistad no es lo unico que quiero contigo y lo sabes...- continue atacandola de frente. Se limpio la boca con la servillenta y dijo

- si... –

- te dire algo – continue, la perorata del invento estaba a punto de salir a chorros de mi boca, paradojicamente le iba a decir a ella lo que nunca le habia dicho ni a mi mas preciadas amantes, sabia como convencer a una mujer de que la deseaba, pero no sabia como reacionaria esta extraña - no fue por coincidencia que entre al café paris – ella se removio en la silla un poco pero no se levanto – era por ti...te habia visto con anterioridad en medio de la calle, entre alli a buscarte por que me gustaste desde el mismo momento en que tu cruzaste por mi vista. Quiero conocerte y necesito que me lo permitas -

Trago en seco según pude ver en su garganta, no me miro pero aun asi, a lo que fuera que estuviera mirando tenia los ojos fijos e inmoviles.

Tenia una mano abandonada a un lado de la copa y se la agarre antes de que tuviera oportunidad de retirarla, como era de esperar eso fue lo primero que intento pero no la solte, la halo dos, tres veces pero segui aferrandosela con toda la suavidad que sus movimientos me permitian.

- - sueltame...- dijo ella mirandome a los ojos por fin. Pero esta vez no iba a ceder a su crisis

- - no quiero asustarte pero no te voy a soltar...nunca- añadi con desicion - quiero una respuesta - exigi despues

Los ojos de ella se cerraron y para sorpresa mia esta vez una carcajada histerica salio de su boca.

No me esperaba eso y menos que saliera con lo que dijo a continuacion

- - si esto se trata de alguna especie de broma la verdad es de muy mal gusto - su histeria desparecio tan rapido como llego, apartando su mirada me dijo - por favor...me conoces tan solo hace 4 dias, solo mirate...mirate...y mirame...yo...no te gusto y no veo la gracia a todo esto.- otra vez quiso levantarse salvo que esta vez habia un brillo perlado en sus ojos que asocie con las lagrimas. Muchas de las mujeres que tenia solian reaccionar de esa manera en un intento por que me queara con ellas por lastima, pero las de ellas jamas me parecieron tan sinceras como las de esta niña.

- - esto no nos lleva a ninguna parte - dijo ella, salio otra vez, esta vez mas suavemente de manera que nadie se volvio a vernos.

A mi vista y a la de cualquiera que en serio hubiera decidido mirarnos pareciamos una patetica novela romantica. Deje dinero suficiente para cubrir la mesa y la propina y sali en su busqueda nuevamente.

Solo que esta vez estaba parada en medio de la acera mirando hacia el cielo como si hubiera alli algo interesante. Debia percibir mis pasos pesados pero no se dio la vuelta, la cogi del brazo y se la di yo mismo, sus ojos estaban en los pies nuevamente

- - mirame, maldita sea!- le dije fuera de mis casillas, estaba siendo trujan y lo sabia pero esto estaba fluyendo mas despacio de lo que estaba planeando, nego con la cabeza y tratao de irse. -

- - solo quiero irme de aqui...- confirmo mi suposicion

- -quiero que me mires - le dije cuando dejo de retorcerse, estaba intenando que no la mirara a la cara para no ver sus lagrimas pero era imposible ya que la luz que se filtraba por entre nuestras figuras no ayudaba a su proposito y le brillaban en la cara

- - Isabella por favor...- le dije, Dios, nunca habia tenido que pedirle algo a alguien con tanta insistencia, nadie nunca habia intetando huir de mi en tantas oportunidades, algo me decia que queria ceder, pero habia otro algo mucho mas profundo que los propios deseos de ella que se lo impedian - nunca me llames mentiroso...no cuando hablo de lo que siento - una carcajada mental broto de mi conciencia, me estaba burlando de mi mismo ante mi propia falsedad. - eres adulta y lo entiendes bien, puedes entender que para un hombre eres atractiva, en este caso ese hombre soy yo.- hale su brazo de manera que quedara mas cerca de mi, iba entablar el primer contacto, ella no se resisitio - no creo que tenga explicacion y no creo que la tengas tu tampoco de por que no he podido dejar de pensar en ti desde que te cruzaste en mi camino, - di un paso mas hacia ella hasta que mi estatura la sobrepaso fuertemente - ni de desear verte de nuevo, - aqui venia la prueba final, deje su muñeca y a cambio sujete su menton con mas fuerza de la necesaria, sin importarme si alguien estaba viendo o no clave la mirada en su boca y le dije mas cosas para conquistarla - ni de desear besarte hasta que no te quede boca mas que para mi...-

Sus pupilas se dilataron cuando dije esto y sus ojos me miraron anonadados finalmente

- - yo...- !atrapada! , el temblor de voz me indicaba que mis palabras habian surtido efecto.

Reaccionando mas por instinto que por que realmente lo hubiera planeado sujete su menton y aprete su boca contra la mia, me sorprendio la textura de casi almohadilla que tenian, el labio inferior era carnoso y sensual. era relatuivamente una boca pequeña. Ella permanecio tan estatica y tan en tension que por un momento pense que se ibaa quebrar de la fuerza con que estaba conteniendo su cuerpo. Dude si apartarme o no, seguramente me iba a abofetear y tendria que empezar de cero.

Cual fue mi sorpresa cuando senti su boca moverse, cuando menos lo pense ella me estaba devolviendo el beso, me aparte sin poder soportarlo mas.

No era por rechazarla. se trataba de mi, por encima de mi venganza y de todo lo demas yo era un hombre con instintos, y estos, contrario a mi voluntad se estaban despertando voluminosamente.

Mire su boca roja de la presion que habia ejercido sobre ella, era el beso mas extraño que jamas habia recibido.

Normalmente todas las mujres a las que habia besado tenian experiencia para ello, debia admitir que era algo fuera de la rutina besar a una iexperta, segui mirandole la boca pensando que lo mejor seria que me acostumbrara, iba a pasar 3 o 4 de los siguientes meses besandola.

Ella se arreglo un poco los cabellos y me pidio sin mirarme

- - podrias, por favor llevarme a casa? - no dijo nada relacionado con el beso, pero no esperaba mas, ya tendria tiempo para adaptarla.

Cuando caminamos hacia el parqueadero donde habia estacionado mi auto, mientras nos acercabamos me toque brevemente los labios. Si, contrario a lo que habia creido antes, iba a ser interesante.

El camino del vuelta transcurrio exactamente como el de ida, en el silencio total.

Cuando nos detuvimos frente a la puerta del edificio deñ departamento, ella hizo ademan de bajarse desabrochandose el cinturon, pero cuando se iba a dar la vuelta le cogi el brazo, su codo se me clavo suavemente en la palma de la mano. Esta vez no hubo halones ni movimientos convulsos, solo se quedo mirando mi mano fijamente.

- - quiero disculparme por...- comence, debia congraciarme para tenerla en la palma de la mano, tal como a su codo.

Pero ella me detuvo negando con la cabeza y sonriendo levemente.

- - no tienes que disculparte...yo soy el problema... -

Ahora el que la detuve fui yo

- - escuchame...dije que me gustas y mucho, lo siento si estoy siendo muy directo pero aprecio la sinceridad - era un poco loco que esa frase no se aplicara realmente a lo que yo era en realidad. - quiero ser algo mas que tu amigo...sabes de lo que hablo.

No queria decir realmente la palabra novio, aunque en unos meses seria prometido, habia tenido queridas, mozas amantes, affaires, y sexo de una noche, y mas pero nunca habia tenido una "novia"

- - no lo se...- dijo ella tristemente, como si la sola idea le causara gran pesar, me senti un poco insulso.

- - quiero enseñarte a besar - le solte repentinamente. Ella volvio a sonreir como a vuelo de mariposa.

- - no creo que quieras hacer tal cosa -

- - pero si quiero - insisti - quiero besarte y quiero que seas mi...- maldicion - novia-

- - no nos conocemos - replico con su patetica excusa-

- - no se tu pero yo si quiero conocerte - por supuesto - a fondo...

Me acerque dentro del auto a la silla del copiloto.

Ella se retiro hacia la puerta cerrada en tanto yo me acercaba hasta que ella no pudo retroceder mas y me encontre casi encima de su silla. Me miraba la boca como si dudara de su labios se entreabrieron en suplica silenciosa, pero yo tenia que actuar, de una manera u otra debia hacerlo aun a riesgo de perder el poco terreno que habia ganado, debia seducirla con la ilusion de todas las mujeres, el enamoramiento.

- - besame...- le dije susurrando mi aliento sobre sus labios, ella cerro los ojos pero yo deje los mios abiertos a fin de poder ver las expresiones que cruzaran por su rostro. Pose mi boca otra vez sobre la de ella. Sus labios lo dudaron, pero despues de unos segudnos aceptaron mis movimientos. Es mas, se intensificaron en medio de el calor que comenzo a hacer dentro del auto. Recordaba perfectamente como hacerlo y debia aditir que sus habilidades como aprendiz eran bastane avanzadas.

Succione su labio inferior con mas atrevimiento instandola a que abriera la boca mas, pero en ningun momento hizo algo para detenerme, solo siguio el ritmo que yo imponia como las ratas seguian al flautista de Hamelin, mi lengua rozo suavemente el reborde de el labio que antes habia chupado y finalmente consegui que abriera la boca, mi lengua rozo la punta de la suya, ella se estremecio un poco, un sonido curioso salio de su garganta junto con el aire de sus pulmones que atrape en mi boca, le di el mio mientras llevaba mi mano hacia su mejilla y despues la sumerjia en sus cabellos recogidos sorprendiendome de pronto por su suavidad palpable. No, no podia estar pensando que esto no iba a resultar tan desagradable despues de todo. No podia. el olor de su piel conservaba aquella tonalidad dulce que me hacia dar ganas de deslizar la lengua por esa piel a cambio de sus labios. El sentimentalismo se estaba apoderando de mi otra vez.

Con furia conmigo mismo me aparte de su boca y de ella lentamente. Ella tenia los parpados cerrados y respiraba con agitacion. me sente y mire hacia el frente esperando que reaccionara. Lo hizo minutos despues

- - lo siento...- dijo en un susurro

- - por que te disculpas?- le pregunte aferrandome del volante para no sacarla del auto de una vez. Necesitaba pensar y ella se disculpaba.

- - no creo que haya sido lo que esperabas-

Pensaba que iba a decir algo como que queria que terminaramos esto de una vez o algo por el estilo, pero salio con eso, verdaderamente se tenia en baja estima.

- - fuiste eso y mas - adule para no hacerla sentir mal, no habia sido tan aburridor despues de todo - no tenemos por lo que preocuparnos, tendremos tiempo de sobra para perfeccionar nuestras tecnica.

Ella parecio asimilar la frase y me agradaba que lo hiciera.

- - espero verte nuevamente - añadi cuando me parecio que habia trascurrido el tiempo suficiente.

- - si... claro...- dijo ella como si deseara todo menos lo que estaba afirmando

Me molestaba un poco ver la gran expresion de resignacion que ella tenia en su rostro, no tenia por que importarme pero me molestaba, mucho.

Lo mas naturalmente posible que pude me incline hacia ella y le bese la frente, el olor a vainillas que emanaba de su cabello entro por mi nariz, debia esfumarme ya.

- - te llamare mañana entonces - en cuanto roce su piel ella se aparto rapidamente y abrio la puerta del auto para salir sin esperar que actuara de caballero.

- - gracias por todo - se dio la vuelta y camino rapidamente hacia la entrada del edificio.

"maldita sea" pense, era demasiado inocente hasta para su propio, bien. Y tambien demasiado ciega, una mujer con experiencia sabria que habria un motivo oculto para buscarla, pero ella parecia haberlo aceptado, con esfuerzo pero lo habia hecho.

Demasiado sensibilismo para que yo pudiera tolerarlo.

Pise a fondo el acelerador del auto y me perdi en la noche rumbo a la mansion.

Cuando llegue alli me quite la camisa y rapidamente me meti en la ducha, dejando el pantalon y el cinturon sobre una de las sillas de mi habitacion.

El agua fria me golpeo como un puño pero deje a mi cuerpo acostumbrarse aunque no quisiera. Cerre los ojos, asi sentia el agua por titurando mi piel, la deje correr por tiempo indefinido por que no lo calcule, debio ser una hora o maximo dos.

sali de la dicha y me seque con una de las toallas, me la anude al cuello y la otra me la ate a la cintura.

como si siguera un ritual ignore la parte superior de mi pijama y solo puse sobre mi el pantalon. quite los cojines de la cama perfectamente tendida que dejaba todos los dias la mujer del servicio. aparte las cobijas y me eche cual perro, como primero cai.

Cerre los ojos y el sueño me llevo con rapidez

Subitamente una imagen que no pedi se dibujo en inconciente.

Una mujer vestida con mi camisa, el verde rodeandola, la inclinacion de su fragil columna, su cuello, su cabellos, sus piernas .. .

Aun en mi sueño senti que la sangre fluia con rapidez a mi entrepìerna. Otra vez esa estupidez del sueño.

Todo cambio con la rapidez de un flash

Sus manos en mis manos y a ambos lados de su cabeza. la sombra rodeando su rostro evitando asi que pudiera conocer su identidad, aunque de poco hubiera valido, hubiera sabido a quien deseaba a metros de distancia, era la misma mujer del sueño. Sus dedos entrelazaron los mios mientras su suave cuerpo atrapaba al mio en toda su humedad y calidez. bese su cuello maravillandome ante la suave textura de su piel que me dieron ganas de morder, un suave olor brotaba de el, demasiado deseable... demasiado apetecible. sus movimientos se acoplaban a los mios mientras diminutas particulas de placer se extendian mas y mas rapido por toda mi colunma vertebral. Necesitaba llegar, pero queria que ella lo hiciera conmigo.

Empuje mas fuerte y mas rapido mientras apretaba sus manos con mas fuerza como si hacer eso me fuera a impedir disfrutar mucho mas de todo esto.

- - Edward...- susurro ella mi nombre, no sabia como era su voz hablando normalmente ya que el deseo hacia que fuera breve, oculta y casi ronca.

Pero oirla trajo una nueva oleada de placer a todo mi cuerpo que me obligo a ir mas rapido y mas rapido, a moverme mas como un animal que como un hombre, pero animal o hombre deseaba a esta mujer mas que a anda en el mundo, con gusto viviria haciendole el amor todo el dia, en cualquier parte y en cualquier posicion que se me ocurriera.

- - Edward...- volvio a llamarme, era el coro de los angeles, que poco faltaba para que ambos alcanzaramos la cima del placer, no habia claridad alguna pero aun asi deslize mis manos de las de ella y le abarque la espalda, la levante contra mi haciendo que la friccion de nuestros cuerpos se volviera casi dolorosamente placentera. Sus suaves brazos se deslizaron por mi cuello y me apreto contra ella al mismo tiempo que sus musculos interiores apretaban mi sexo. - por que...?-

"¿por que que?" quise preguntarle. Sus pechos rozaron el mio produciendome mas calor aun, que poco...

- - ¿por que me mataste?...

Todo se volvio negro y ella desaparecio cuando desperte, pero lo que no desaparecio fue la presion en el pecho que me avisaba algo, como si tarde o temprano fuera a ser el responsable de algo terrible.

Isabella Swan vino a mi mente sin claridad, la aparte rapidamente tratando de concentrarme en recordar el sueño y saber de quien se trataba, con quien estaba teniendo sexo y por que esas extrañas palabras habian sido pronunciadas en el momento de culminacion.

Locura o no sospechaba que se me iba a salir pronto de las manos.

Isabella Swan.

18 de Julio 2007

El restaurante era un sitio muy calido, el aroma que llenaba la estancia me hacia recordar las tardes que gastaba con Emmerald, cuando sus padres no estaban, aprendiendo a cocinar delicias para las dos, el aroma era igual de calido y hacia pensar en cosa buenas como familias, parejas, cosas de ese tipo. Estaba mirando mis pasos por que no me sentia con la fuerza necesaria para mirar al hombre que caminaba a mi lado, era como si se tratara de un sueño, pero la verdad no me moria por ser la protagonista, como habia sospechado tiempo antes, habia algo en el que no me gustaba, algo que me decia que debia permanecer alerta, lo cual era a la vez ridiculo ya que no lo conocia de nada. Era una extraña situacion.

No se como lo logre pero consegui que el no me tomara la mano, pude ver que esa era su intencion en cuanto entramos, pero no tenia la confianza necesaria para ese tipo de contacto, tal vez no la tuviera nunca, tal vez.

Ante el sonido de una suave musica no tuve mas remedio que levantar la mirada de mis horrorosos pies para fijarme mejor en el lugar en el que estabamos entrando, estaba pulcramente iluminado y las mesas estaban distribuidas en un orden particular, cuadros de distintas imagenes colgaban de las paredes impecablemente pintadas, debian ser alguno de esos restsurantes en donde se cocinaba comida de otros paises, esperana encajar, y tal vez descifrar las recetas de algunos de los platos que escribian en la carta.

Cuando dimos unos pasos mas camino hacia nosotros una de esas meseras divas que solian gustarles a la mayoria de los hombres, estaba segura de que el señor Cullen no iba a ser la excepcion y contrario a mis propositos del la noche, los cuales consisitian en no mirarlo mas de lo prudente, visualice su cara en mis ojos, por unos segundos se habia quedado mirando a la beldad. Profundos y predominantes celos envolvieron mi alma sin proponermelo, celos de ella y de el, de ella por ser tan hermosa que no tenia necesidad de atraer a la gente por intereses ocultos, y de el por mirarla a ella cuando se suponia que me estaba llevando a mi, tuve deseos de irme de vuelta y espere no trasmitir mis emociones en la cara, no tenia por que tener celos de ellos, no eran nada mio ni yo de ellos.

- - en que puedo servirle, señor?- hizo presion en los labios en esa ultima palabra con lo cual me dio muy claro a enteder a quien se dirigia, y me daba mas y mas la conviccion de que yo no deberia estar aca, quise darme la vuelta y estaba empezando a acomodar el pie sin importarme lo que el me dijera cuando senti su poderoso brazo sobre mis hombros, lo mire disimuladamente y la expresion que habia visto antes en sus ojos habia desaparecido, ahora parecia estar de mal humor

- - queremos una mesa para dos - ahora la presion en la expresion final estaba en la boca de el, me senti estupidamente orgullosa de que me defendiera, aunque a eso no podia llamarsele de esa manera, y el ya me habia defendido antes.

- - por aqui - indico señoria piernas largas, me entraron unas agudas ganas de cortarselas.

La seguimos, evite mirar al hombre tal vez por que temia que en cuanto lo hiciera lo pillara mirando las piernas o el atrevido contoneo de caderas con el que ella, que me recordaba tanto a Jessica, estaba tratando de llamar su atencion. Cuando nos detuvimos en la mesa que ella indico me fije que la intimidad del acogedor rincon, esperaba que no se dieran situaciones romaticas de las que tuviera que escapar. El no podia estar interesado en mi en ese campo.

Evitando su mirada solo quedo en mi campo de vision su mano que se movio con presteza para correr la silla cuando señorita piernas largas se fue. Nunca, ni siquiera Ben, se habia preocupado por ser caballeroso conmigo, aun cuando se lo rogue en ese momento...

No era el tiempo apto para acordarme de esas cosas, aunque nunca era el tiempo apto de todas maneras debia sacar esos amargos recuerdos pàra siempre de mi memoria, si hubiera alguna medicina para hacer olvidar la hubiera comprado asi costara todo el oro del mundo.

Me sente agradecida evitando el contacto ocular, la razon era que mirarlo a los ojos me parecia grosero, eso por un lado y por otro sentia que mi voluntad flaqueceria cuando volviera a fijar mi mirada en los ojos verde - dorado que recordaba bastante para mi propio bienestar mental.

Aun asi me sentia fuera del lugar en este sitio, la edificacion invitaba a la comodidad y a sentirse confortable, y de haberse tratado solo de mi hasta lo hubiera disfrutado pero el me alteraba, era el y su presencia que sentia como si me estuviera respirando en el cuello en vez de estar a unos centimetros de mi.

Pero no debia ser una buena actriz ya que escuche su voz cuando preguunto.

- - que te pasa?-

Seguramente se habia dado cuenta de que algo andaba mal en mi actitud,era una idiota, debia decirle que no queria volverlo a ver y ya y no estar aca intentando parecer comoda cuando no lo estaba, nunca habia tenido una cita real y no sabia que postura tomar, jamas debi haber aceptado esta invitacion, aun cuando me sintiera en deuda moral con este hombre

- - n...nada - dije rapidamente, pero si a mi me parecia que mi tono habia sido poco veraz seguramente a el peor, si estaba tan atento de mi como parecia. Esperaba que no se hubiera percatado de la manera convulsamente nerviosa en que mis manos se movian unas con otras, era algo que no podia evitar, desgraciadmente, cuando me sentia demasiado tensionada.

La sensacion me producia un escosor extraño en el pecho, al mismo tiempo que parecia dejarme sin aire, esperando que el no oyera lo pesado de mi respiracion, inspire con fuerza para intentar apartar eso, a cambio debia mostrarme agradecida, pase la mano por el aire y le dije

- - gracias por invitarme...este lugar es.. es hermoso - y no lo decia por salvar la situacion, era lo que realmente pensaba.

Pero debia admitir que mi motivo oculto para hablar si tenia la intencion de salvar la situacion. Lo mismo parecia pensar el ya que me dijo sin avisar

- - ¿te sientes nerviosa por mi presencia?- "Dios, como lo supiste", quise contestar, pero que estuviera nerviosa seguramente no era el pago que el debia esperar despues de haberme librado de la penosa situacion de dias anteriores, intente que mis manos no se movieran, no me pare a pensar ni a mirar con cuanto exito lo estaba consiguiendo

- - no...claro que no...-

- - en ese caso, puedo decirte algo? -

"Depende de que sea ese algo" quise responder pero la voz no me salio, yo no era tan audaz como mi conciencia a veces me hacia pensar.

- - por supuesto - y me arrepenti profundamente de lo que dije ya que el, por supuesto, daba cavida a cualquier guarrada o cualquier cosa que se le ocurriera decirme y aun no estaba preparada psicologicamente para enfrentarlo.

- - no sera la ultima vez que nos veamos y lo sabes ¿verdad?- ese fue el momento que mis manos eligieron para quedarse quietas, aparte mis ojos de ellas y a pesar mio, y como si mis ojos tuvieran voluntad propia viajaron por la cara de el hasta los suyos, aunque los mire por unos segundos aparte los mios rapidamente, el fuego de sus ojos, esmeraldas en ese momento, quemo mi poca fortaleza, el era demasiado atractivo para estar sentado aqui conmigo.

Por un momento me pregunte si no estaria buscando conmigo alguna experiencia nueva para luego...

Ben cruzo otra vez por mi cabeza, esta noche parecia haberse propuesto entrar en ella asi yo lo quisiera o no, antes de que pudiera impedirselo a mi bocaza la pregunta se escupio sola

- tienes una novia?- quise levantarme y salir corriendo ya que tenia miedo y a la vez ganas de que dijera que si a la primera y no a la la postura de su cuerpo identifique que le habia molestado mi pregunta pero no identifique por que. Si realmente este señor queria algo conmigo acababa de estropearlo estrepitosamente, lo supe asi cuando me contesto.

- - no - secamente, como un desierto, asi sonaba su masculina voz, quise excusarme, mejor quedar como amigos que como enemigos

- - lo siento...no debi preguntarte eso, solo queria...- el me interrumpio antes de que la verborrea, de la que nunca habia sido partidaria, siguiera saliendo de mi boca.

- - no importa... no tengo a nadie...todavia- volvio a hacer presion en la ultima frase, el todavia me hacia pensar en mi...y en el...no, por supuesto que no - y tu?- pregunto despues de unos momentos, "¿yo que?", luego cai en cuenta de el tema que estabamos hablando, de los novios y...

Me estaba preguntando si yo tenia novio... por un momento me senti tentada de decirle que si a fin de que, si tenia algun interes en mi mas alla de lo normal, se le pasara en cuanto lo supiera, pero los recuerdos hicieron mella en mi en ese momento sin pedirlo siquiera. Ben y su apuesta... el dia maldito, del que nunca me recupere...

- - no - respondi no muy segura de mi voz - no tengo

Pero subitamnete mis palabras dieron paso a una seria de bombardeos en mi cabeza en los que solo podia ver imagenes del pasado que habia intentado dejar atras, de sus manos en mi cara, de su voz ahogandome con palabras horribles, de su fuerza superior...

Y si este hombre queria..., no...por favor Dios apartalo de mi... no hagas que lo abrume con mi maldita vida

Mas y mas imagenes que no pedi ver me atrofiaron el pensamiento, solo pense en salir de alli ya que me estaba sofocando, esto solo me habia pasado en una ocasion y habia entrado en depresion durante casi un mes, con resultados desastrozos para mi vida.

"ni para eso sirves" escuche la voz de Ben en el momento en que me dejaba ahi, abandonada... golpeada tanto verbal como fisicamente..., me estaba ahogando y si no me iba a mandar al diablo todo. Intentando no dejarlo en ridiculo me levante y no lo mire

- lo siento mucho - exprese rogando a Dios sin voz que hiciera que el me comprendiera- pero creo que debo irme - tome mi pobre bolso, archive mi pobre vida y sali caminando rapidamnete antes de que las fuerzas abandonaran aun mas mi cuerpo.

Cuando estuve fuera, dado la experiencia de noches anteriores, decidi irme en un taxi, que me llevara rapidamente para encerrarme en mi propio dolor y dejar de lado lo que intentaba no olvidar.

Vi a lo lejos el color representativo de uno de ellos, y alargue la mano para pararlo. En el momento en que mi mano toco el picaporte de la puerta del movil una mano se poso sobre el vidrio y la volvio a cerrar con fuerza, no tenia que tener dedos en la espalda para no reconocer esa viril mano. Que cuando dejo el taxi me sujeto el brazo con mucha fuerza, eso era lo ultimo que yo necesitaba por que en ese momento escuche la voz de Ben en mi cerebro y la mia tambien."sueltame"

"no quieres que lo haga, tu quieres esto"

"no...por favor"

Sacudi la cabeza y el resto de mi cuerpo junto con mi brazo al cual queria de vuelta, lo hale con una fuerza que ni yo sabia que poseia y repeti esa palabra con la cual una vez rogue

- - no me toques - dije con calma mesurada la cual no sentia en ninguna parte de mi cuerpo, el se aparto tal vez previendo el peligro de colapsar en el que me encontraba en ese momento.

- - que es lo que te pasa?- pregunto el, pero no me sentia preprada y dudaba que me sintiera nunca, para decirle que era lo que me pasaba, hacia mucho tiempo que habia aceptado que ese trauma que habia dejado secuelas psicologicas demasiado fuertes. El dio un paso de vuelta casi del mismo tamaño del que uso para retroceder.

-no te acerques...- le adverti no muy egura de como reaccionaria si el daba un paso mas hacia mi en ese momento, no queria sucumbir al panico, pero tal como Ben, Edward Cullen pertenecia al genero masculino, alargo su mano con la clara intencion de tomar la mia, la enganche con la otra para rechazarlo son palabras y le dije otras mas que merecian atencion - por favor...solo dejame ir.

- ¿que es lo que pasa? - volvio a preguntar el insistiendo en algo que no tenia sentido, deberia dejarme sola, si seguia asi probalmente le vomitaria encima sin resuello. Por mi modo de respirar empece a sentir el cosquilleo de adormecimiento en toda la cara, intente calmarme, esta crisis de ansiedad nada podia hacer para ayudarme. Me puse las manos en toda la cara y despues las deje descansar en las sienes masajeandolas con fuerza en un intento de ayudar que la sangre fluyera a mi cerebro con rapidez, cerre los ojos intentando olvidarme de que tenia un publico de una persona, la persona que menos jamas hubiera deseado que me viera en este estado...

- -perdoname- dije cuando pude respirar mejor, aparte los dedos de mi cara, todo esto no tenia sentido, me dije de repente.

Deespues de todo lo que habia sufrido aun seguia aqui de pie, esa conclusion me llego tan rapidamente como nada, y asombrosamente me sirvio para obtener resuello temporal, el aire penetro a mis pulmones como se lo ordene y con esfuerzo aparte todos los recuerdos dolorosos a el rincon de recuerdos dolorosos de mi cerebrito. Pide disculpas, me dije, y solo espera que el te diga el momento en que era mejor marcharte y terminar con la gran farsa – no se que me paso -

Pero lo sabia demasiado bien, no habia tenido atencion psicologica y habia tenido que recuperarme sola, lo habia conseguido a medias, ahora me daba cuenta, y nunca me iba a curar, esperaba que esa dolorosa experiencia jamas se repitiera en mi vida, y aunque no andaba con la cautela pegada al hombro, esperaba tener los ojos bien abiertos para cuando ese dolor decidiera aparecer y dañar mi vida para siempre.

No, eso nunca iba a pasar de nuevo. No lo iba a permitir, aunque fuera alguna cosa buena debia estarme esperando en alguna de las esquinas del destino

- ¿que es lo que debo hacer para convencerte de que no te hare daño? - me pregunto el despues de unos segundos, lo mire rapidamente y el corazon se me calento cuando capte, por unos instantes, el fuego de esos ojos impresionantes

- no eres tu...- dije tratando de solventarlo de la culpa, si es que la sentia– soy yo...pero... – tenia un sabor amargo en mi boca que no me ayudaba a hablar demasiado– ya no importa...-

Me toque la cara pero la ambulatoria espasticidad que habia comenzado a sentir remitio cuando pude respirar mejor.

debia lucir como un topo con mucho pelo, me acomode los mios intentando no imagInar como se veian ante los ojos de otros - lo siento - dije cuando capte su mirada sobre mi por el rabillo de ojo- volvamos adentro...y olvidemonos...de esto...- sugeri esperando siquiera conservar lo poco de este buen hombre que aun me quedaba.

Camine de vuelta hacia la decorada puerta, el estaba a mi lado, alargo su mano y casi la entrelaza con la mia, pero solo se quedo con mi huesuda muñeca, sus dedos me quemaron, literalmente, la piel, era un calor que no habia sentido nunca, un calor casi reconfortante, lo mire por unos segundos, mi cuerpo inconcientemente se volvio un poco en busqueda de ese calor, el movio un poco los dedos sobre mi lechosa piel como tanteandola, lo mire o no lo mire realmente para no caer en su calido verdor, el hablo.

- no quiero que te hagas una imagen equivocada de que es lo que quiero contigo Isabella – su voz baja y llena de confidencia me hizo terminar de olvidarme de lo que habia pasado,pero tambien me trajo un poco de conviccion acerca de que la noche aun no habia terminado.

El calor de su mano traspaso mis entrañas. Por instinto trate de apartarme de tan extraña sensacion, pero esta vez el me tenia correctamente sujeta, de manera que no me hacia daño pero tampoco me liberaba, el estaba demasiado cerca para mi salud mental

- - vamos adentro y comamos, necesitamos hablar, esta es la razon por la que estamos aquí -

Lo cual nos llevaba al principal proposito y que era lo que el tenia planeado para esta noche antes de que me poseyera el demonio de los recuerdos

Me llevo dentro con el calor de sus dedos quemandome la que, hasta el dia de hoy, habia sido una piel insensible a quemaduras.

Mucha gente en el restaurante nos volvio a ver, no sabia que tipo de conclusiones estaban sacando y la verdad tambien me importaba poco, la vida privada lo era. Ubico la mesa otra vez y nos sentamos en nuestros mismos puestos de antes.

Un ejemplar del sexo masculino, esta vez, se aceco a tomar la orden de Edward, nos alcanzo educadamente las cartas a pedir, renovando asi mi proposito de disfrutar, al menos domesticamente, la visita a este elegante restaurante. La carta negra estaba adornada de dorado y los platos que lei, los que estaban en idiomas reconocibles como el aleman o el frances, llevaban ingredientes deliciosos que combinados con las salsasly los saborizantes adecuados crearian el doble de platos de los que alli mostraban.

Pero no lo iba a sugerir, si algun dia abria un restaurante propio, con la cantidad de cualidades para la cocina que la gente decia que poseia, no podia andar por ahi ventilando recetas y mezclas de mi invencion,

Vi un platillo que Emmerald apreciaba mucho y en el cual se nos iban las casi millonarias cantidades de pavo que sus padres solian comprar, para placer de ella, como si temieran que fuera a morir pronto, y asi habia sido, mire inconciente mis manos las cuales temblaban transmitiendo esa nerviosa energia a la carta que estaba sosteniendo, hice un intento vano por sosegar mi pulso, ya pasaria, pero por el momento aun seguia alli, de todas maneras esto si lo podia ocultar moviendo un poco mas las manos para que el palpito tembloroso no se notara

Pavo a la naranja, ese era el platillo que iba a comer en honor a Emmerald. Como no queria que la voz me saliera temblorosa me incline un poco hacia el y le señale lo que queria

- pavo a la naranja? - dijo sonriendo - es un buen plato - si lo era, uno de los mas deliciosos que alguna vez probe, me explaye un poco en la explicacion de mi seleccion

- lo se, lo preparaba mucho cuando...- recordarla a ella fue casi o igualmente doloroso que acordarme del orfanato asi que cerre mi boca y no dije nada mas

- - Esta bien - dijo el asintiendo y para mi deleite interior dijo - Tomare lo mismo, traiganos dos Pavos a la naranja...y tal ves un vino blanco italiano, muy añejo.

- excelente eleccion, señor – alabo el mesero el gusto de el en cuanto al vino.

Cuando se hubo marchado se llevo con el la posibilidad de usar mi voz de nuevo, vi que Edward se apoyaba en la silla evidentemente mas comodo que yo en esta situacion. Mis manos volvian a estar en contacto.

- ponen una musica excelente – solto el de repente. Debia admitir que el juego suave de flautas y pianillo hacian el ambiente bastante agradable

- vienes con frecuencua? - le pregunte y otra vez quise darme de patadas ante mi estupidez, podia asociar mi pregunta a lo que fuera si antes yo no le hubiese preguntado sin tenia novia, error tras error.

- solo cuando quiero estar solo – respondio el, sonrie un poco ya que no veia entonces el proposito de estar interrumpiendo su soledad

- entonces cual es el sentido de que yo este aquí ? - le pregunte abiertamente pero mirando a la mesa

- solo cuando quiero estar solo...con alguien - aclaro,en este casi conmigo, me pregunte por que hacia esto. Pero no me atrevia confrontarlo con los ojos, ni con la boca, deje de sonreir al pensar en las intenciones, cuales quiera que fueran, que el tenia para conmigo

– - ¿por que casi nunca me miras cuando te hablo? - solto de repente, retrocedi ante su pregunta directa pero por que me lo preguntara tampoco le di mis ojos -

- no lo se...- pero si lo sabia y lo habia pensado anteriormente, por que me daba miedo mirarlo a los ojos y caer en un juego desconocido

- no importa, al menos yo si puedo mirarte...- "¡glup!", trague, su voz baja me dio un cosquilleo en todo el cuello, mas cuando me revelo que si habia estado mirandome. No sabia que decir asi que permaneci en silencio.

15 minutos transcurrieron antes de que nuestro plato estuviera listo, dos meseros, uno con las dos bandejas con los platos, y otro con la botella de vino se acercaron a la mesa

En silencio cada uno deposito su carga, mire el vino recordando lo que me decia siempre Emmerald acerca de comportarse en una mesa, habia una manera especial de tomar la copa, ella y yo, muchas veces habiamos intentado probar el vino de sus padres, pero por algun extraño motivo ellos siempre nos descubrian. Cuando me marche no vi la necesidad de siquiera probar el alcohol asi que, en resumidas cuentas, jamas habia probado el vino.

El mesero del vino descorcho la adornada botella y deposito cierta cantidad en la mi copa y en la de el. Edward movio la suya y lo olfateo un poco, le mire el menton a riesgo y vi que hacia un gesto con la copa para que yo lo probara, acerque la copa a mis labios tomandola de la manera en que ella, Emmerald, me habia enseñado. Deje que una minima cantidad de el vino probara la punta de mi lengua, hacia ligeras cosquillas y era amargo y dulce a la vez, frunci un poco el ceño ante la primera impresion, pero al dejarlo deslizar por el resto de mi lengua dejaba un sabor agradable.

- es...delicioso- dijo admiti con una sonrisa cuando lo deslice por mi gargante y me calento el pecho y el estomago.

El bebio y despues atacamos prudentemente los platos frente a nosotros

Ibamos casi terminando cuando el volvio a hablar, yo estaba bebiendo un poco mas del agradable vino cuando escuche si voz y habia estado tan al pendiente que hablara que inspire al mismo tiempo que trague.

- hay algo que debo decirte.

Tosi bastante intentando que el resto de la comida no siguiera el mismo camino de el sorbo que bebi antes, todo por el algo que el queria que yo conociera, trague una ultima vez y espere que dijera lo que queria decir

- amistad no es lo unico que quiero contigo y lo sabes...- no, no lo sabia, pero lo sospechaba que no era lo mismo.

- si... – seguramente mi si debio sonar demasiado bajo ya que el continuo

- - te dire algo, no fue por coincidencia que entre al café paris, – oh no, el no deberia estar diciendo esto, senti que las piernas me picaban por salir de ahi de una vez por todas– era por ti... - continuo el - te habia visto con anterioridad en medio de la calle, entre alli a buscarte por que me gustaste desde el mismo momento en que tu cruzaste por mi vista. - se paro unos segundos, como si dudara decir lo que iba a decir a continuacion - Quiero conocerte y necesito que me lo permitas -

Ahi estaba, el asunto era, de que manera queria conocerme?, observe todo al rededor mio esperando tal vez que un cuadro o algo me diera la respuesta que necesitaba o que fuera apta para ese momento.

Se movio mas rapido que un leon al acecho y antes deq que pudiera darme cuenta tenia mi mano entre la de el, hale inconcientemente pero la firmeza de su agarre me impidio tener mi mano de vuelta

- - sueltame - Ben y su mano agarrandome, busque que el rostro de Edward Cullen no se conviritera en el de el, tuve que mirarlo de frente, pero tal como Ben, tampoco lo hizo

- - no quiero asustarte pero no te voy a soltar - movio su mano un poco- nunca... quiero una respuesta - hablo en tono exigente pero no me sentie bien para responderle, cerre los ojos intenando, por todos los medios no verme bombardeada de recuerdos de antes.

Pero fue inutil

"Se mia Bella, y estaremos juntos para siempre, tu sabes que yo te amo."

Y nada era cierto, nada. El mismo se habia encargado de decirmelo el desastrozo dia en que intente que me dijera la verdad, el dia de mi desgracia que se sumo a esa peticion

"No te quiero, apenas `puedo tolerar tocarte, besarte, sera mejor que te apartes de mi, soy demasiado para ti, mas de lo que te puedas imaginar"

Y tenia razon, el era demasiado, lo mismo que este hombre. Intente hacer que lo entendiera, era hasta casi comico ver como no encajabamos bajo ninguna circunstancia, tanto era asi que solte una carcajada sin sentir verdadero humor, abri los ojos y haciendo uso de mi voluntad para no caer en e brillo de sus ojos le dije.

- - si esto se trata de alguna especie de broma la verdad es de muy mal gusto, por favor...me conoces tan solo hace 4 dias, solo mirate... - me quede sin palabras intentando que con esas pocas asimilara lo que estaba tratando de decirle, pero despues volvio el resto de la explicacion, estaba usando casi los mismos argumentos que Ben habia usado conmigo, solo que para hacerle entender a el y no a mi, yo ya lo tenia lo suficientemente claro - mirate...y mirame...yo...no te gusto y no veo la gracia a todo esto.- A pesar de mis proposito, humillantes lagrimas intentaron brotar de mis ojos, yo solo habia llorado el dia que Emmerald murio, ni siquiera cuando Ben me habia hecho lo que me habia hecho, habian salido lagrimas de mis ojos, por que mas que triste me sentia ultrajda, usada y enfadada. epseraba que el no las viera, me puse de pie mas suavmente que la vez anterior, rogando que el no intentara detenerme

- - esto no nos lleva a ninguna parte - hubiera sido hermoso de no ser como esto, de no tener este sucio pasado que me vedaba a todo lo demas, camine hacia la salida con bolso en mano y lo mas despacio que pude. Lamentaba que el tuviera que pagar toda la cuenta, pero de todas maneras no nos ibbamos a ver mas despues de eso.

El me gustaba, y debia admitirlo, pero yo a el no podia hogstarle, o bien podia gustarle ahora pero mas adelante cuando todos mis trau,as y lo demas salieran a la luz, iba a dejarme y no me sentia nada preparada para otra leccion de esas

Cuando sali el aire de la noche me pego en la cara dandome algo de frescura, me pare en medio de la acera con el solo proposito de mirar las estrellas y preguntandome cuando seria que estaria entre ellas, deberia morirme de una vez y dejar de incomodar a los demas.

Para mi tortura escuche pasos detras de mi, era el, ya habia aprendido en poco tiempo a identificarlo.

Sus dedos de hierro se cerraron en torno a mi muñeca otra vez

Solo que esta vez me hicieron dar la vuelta con cierto dejo de brusquedad

- - mirame, maldita sea!- gruño el cuando mire hacia su pecho aterrada de tenerlo tan cerca, negue con la cabeza, me negue sentir nada , me negue quedarme ahi con el, y me negue a seguir viviendo de recuerdos malditos, trate de zafarme otra vez sin exito

- - solo quiero irme de aqui...- le pedi completamente ajena a que se lo estaba rogando de veras

- -quiero que me mires - dijo el a cambio de mi ruego, me quede quieta, si queria una mirada por que lo soltara, pues bien se la daria, intetne pero mis ojos no siguieron a mi cerebro

- - Isabella por favor...- pidio el mas lentamente, por experiencia personal sabia de pedir y que no se concediera - nunca me llames mentiroso...no cuando hablo de lo que siento - no por favor, que no siga - eres adulta y lo entiendes bien, puedes entender que para un hombre eres atractiva, en este caso ese hombre soy yo.- movio su mano de manera que mi cuerpo se vio atraido hacia el de el inexorablemente pero eso no fue suficiente para que no pudiera escuchar con exactitud que era lo que estaba diciendo, me habia hipnotizado - no creo que tenga explicacion y no creo que la tengas tu tampoco de por que no he podido dejar de pensar en ti desde que te cruzaste en mi camino, - pensaba en mi como Ben...no, Edward era demasiado distinguido, demasiado... demasidado para tener las formas y la educacion de un tarado como Ben, estaba aun mas cerca que antes - ni de desear verte de nuevo, - continuo lisongeandome y yo me bebia cada una de sus palabras como si estas fueran agua y yo hubiera pasado 40 años sin ella, sus dedos palparon mi carne con suavidad y se movieron hacia mi cara, me estaba tocando la cara...- ni de desear besarte hasta que no te quede boca mas que para mi...-

Un Beso.

Los besos de Ben no se podian considerar tal, un ligero roce de labios de vez en cuando..., lo mire, finalmente, que tipo de beso podia recibir alguien como yo de el? estaba en realidad pensando que me iba a besar y que yo lo iba a dejar?

- - yo...- No te voy a dejar...-

Tanto mis pensamientos como mis palabras retrocedieron de avance cuando vi que se inclinaba hacia mi, el olor de su caro perfume entro por mi nariz instandome a dar conciencia de que era lo que iba a pasar, sus dedos estaban apresando mi menton para que no me apartara, pero a conciencia debia admitir que estaba paralizada al tener tan cerca la perfeccion de su rostro.

Sus labios hicieron contacto con los mios, que me parecieron cuartados y secos a comparacion de los suyos, estaban calientes y eran...

Estaba paralizada, no sabia que hacer mas que mantener los ojos cerrados para no avergonzarme de mi misma. No sabia que hacer o como actuar, el estaba casi succionando mi labio inferior asi que supuse que...si, le iba a responder. Copiando la misma suavidad con que su boca estaba tocando la mia, abri un poco mis labios y atrape el superior de el, hice una ligera presion antes de probarlo suavemente con mis labios...

Subitamente el se aparto y yo cai a la realidad tan rapido como me habia apartado de ella. Abri los ojos esperando ver decepcion en los de el, pero esos ojos que habia temido ver estaban mirando mi boca, mi maldita boca.

El dio un paso hacia atras y yo hice lo mismo, senti el frio de la noche pegar contra el calor de mi piel, la brisa me agito el cabello y trate de acomodarlo evitando mirarlo, estaba mas que claro que habia sido una completa decepcion para el, no habia mas excusa para quedarse

- - podrias, por favor llevarme a mi departamento? - le pedi, no tenia mas animos para seguir soportando lo que el estaba fingiendo

Asintio aun con la mirada perdida y lo segui hacia el parqueadero hacia donde recordaba que el habia estacionado.

Subi cuando el me abrio la puerta y en cuando estuve acomodada abroche el cinturon de seguridad.

Senti cuando el subio al otro lado pero me quede mirando nada mas que todos los edificios y calles que ibamos dejando atras a medida que nos acercabamos a donde yo vivia, no dijimos una palabra pero no havia falta, todo estaba dolorosamente claro.

Me di cuenta de que habiamos llegado cuando el se detuvo, sin mirar hacia nada mas que mis manos desabroche el cinturon de seguridad con cierta dificultad por el temblor. que decepcionante debio haber sido para el una mujer que no supiera como responder a un beso. Me di la vuelta para salir, pero me petrifique cuando senti su mano en la curva de mi brazo. Me volvi para mirar su mano, no estaba preparada tampoco para su lastima.

- - quiero disculparme por...- el beso, adelante, lo alente mentalmente, dilo...no no lo digas

Negue con la cabeza antes de que el dijera palabra, sonrei tristemente adelantandome a lo que el me iba a decir

- - no tienes que disculparte...yo soy el problema... -

Iba a continuar diciendole cual era mi problema pero el me interrumpio

- - escuchame...dije que me gustas y mucho, lo siento si estoy siendo muy directo pero aprecio la sinceridad - conjugo los versos en presente, aun le gustaba... - quiero ser algo mas que tu amigo...sabes de lo que hablo.

Mas que mi amigo queria decir lo que yo temia, sonaba infantil y aunque no era demasiado mayor no me apetecia usar la palabra novio, de ella habia tenido bastante

- - no lo se...- dije intentando ganar tiempo, no sabia cual era la expresion de mi cara pero debia tratarse de una de indesicion.

- - quiero enseñarte a besar -dijo tan repentinamente como respirar, como un grito. Lecciones de besos no era lo que yo esperaba. Sin embargo la idea de agradarle penetro por mi conciencia gustandome mas de lo necesiario, sonrei intentando que recapacitara

- - no creo que quieras hacer tal cosa - refute

- - pero si quiero - insistio el - quiero besarte y quiero que seas mi...- no lo digas - novia- augh!, lo dijo. ser su novia se abria ante mi como la posibilidad mas remota jamas contemplada.

- - no nos conocemos - suplique que lo entendiera aunque el ya parecia cansado de esa excusa

- - no se tu pero yo si quiero conocerte... a fondo...

Un beso, un abrazo, una caricia...

Senti su calor acercandose a mi.

Pero era demasiado calor...demasiada virilidad para mi...retrocedi a medida que el siguio acercandose, suspuse que tomandose en serio su proposito de enseñarme a besar, senti el picaporte de la puerta y supe que no podia recular mas, y el no se detuvo hasta que no estuvo sino a escasos centimetros de mi. Mire sus labios recordandolos sobre los mios y lo que habian hecho, hice un repaso mental pero no podia recordar mas alla de los labios entrelazados unos encima de otros.

- - besame...- susurro el, sonaba como si de verdad lo deseara, como si estuviera dispuesto a rogar por ello, aspire el olor a nueces de su boca, sin poder tolerarlo mas cerre los ojos y deje que hiciera lo que quisiera.

El calor de su boca toco el mio otra vez, solo que en esta ocasion el atrapo mi labio superior, otra vez comenzo a degustarlo y yo hice lo mismo con el de el. Su cara se acerco mas a la mia al mismo tiempo que sus labios tomaban mas y mas terreno del mio, senti que casi lo tragaba en algun momento, abri mi boca para hacer lo mismo con el.

Senti el contacto de su lengua en el labio escogido, una marea de desconocidas sensaciones se apodero de mi boca, de mi cara y de ahi al resto de mi cuerpo, solo me quedo el instintoo que me obligo a aceptar de lleno el beso que el estaba ofreciendo, senti otra vez ese tenue contacto pero contra mi propia lengua. Que pasaria si yo la degustaba como el habia hecho con mi labio?. Un sonido jamas emitido broto de mi boca, me sentia demasiado bien haciendo esto, no estaba pensando en el... que demonios estaba haciendo?, Su lengua se volvio persistente y movi la mia hacia la de el. Hicieron contacto, luego el aparto su boca. Aun con los ojos cerrados podia percibir su respiracion a pocos centimetros de la mia, hasta ese momento no me di cuenta de que tan mal habia respirado concentrandome solo en el.

Se aparto de mi y se sento bien en su silla. Tampoco esta vez pude dicernir si habia sido tan agradable para el como lo habia sido para mi

- - lo siento...- dije antes de que empezara el

- - por que te disculpas?- pregunto el ajeno a todo lo que estaba dando lucha en mi interior

- - no creo que haya sido lo que esperabas- confese mi miedo antes de que pudera pensarlo bien, pero el me dijo

- - fuiste eso y mas - habia demasiada sinceridad en sus palabras, quede practicamente embelesada por ello, la voz de...Ben jamas habia sonado asi - no tenemos por lo que preocuparnos, tendremos tiempo de sobra para perfeccionar nuestras tecnica. -

Si todos los besos eran asi me veria en la obligacion de pedir lecciones mas seguido

De pronto cai en cuenta de que habia aceptado ser su novia, aunque no tenia verdadera idea de que era lo que debia hacer al respecto, habia dejado represamientos de lado en el momento en que me beso, habia dejado de lado años de duda... no sabia a donde me iba a llevar todo eso

- - espero verte nuevamente - dijo despues de unos momentos.

- - si... claro...- dije, que pasaba si no llamaba?. y si solo era una exscusa para que abandonara el auto rapidamente y no dejarse ver de mi nunca mas?, debia aceptar que algo como eso estaba mas que presto a pasar, no confiaba demasiado

El se volvio hacia mi y me beso en la frente, como si se tratara de una promesa

- - te llamare mañana entonces - dijo, su aliento calento mi frente, me aparte instintivamente, sali rapidamente concediendole lo que yo suponia que deseaba.

- - gracias por todo - dije antes de volverme y escapar hacia la soledad de mi departamento. escuche tras de mi como arrancaba rapidamente, "ojala lo vuelva a ver" pense para mis adentros mientras subia las escaleras.

cuadno entre al departamento cerre la puerta con el pasador y me desabroche el cabello, las galletas de la vecina me devolvieron la mirada,

Suspirando entre a la habitacion y me cambie de ropa.

Tendria que madrugar al dia siguiente.