Dark Chat

viernes, 22 de abril de 2011

Conquistando tu Amor

CAPÍTULO XVIII


BELLA POV



Después de la enorme confesión que hice las cosas cambiaron radicalmente, mis padres intentaban por todos los medios llegar a mí, pero algo había cambiado, algo que quizás me negaba a creer por completo en esos dos años que pasé en mi infierno personal, no los sentía como mis padres, me habían defraudado completamente, así que me fui distanciando de ellos, mientras ellos querían acercarse yo me quería alejar, estaba tan confundida con mis sentimientos, lo único que tenía claro eran mis sentimientos por Edward, esos no cambiarían jamás, siempre lo amaría, pero mis padres nuevamente hacían lo todo lo posible para que me alejara más de ellos, especialmente Renne que se negó rotundamente a apoyarme en mi relación con mi profe, Charlie era más comprensivo y en cierto sentido me dio su aprobación, claro que con condiciones que en ese momento no me gustaron para nada, por lo que tuve mi ataque de rebeldía al no dejar que estuviéramos juntos como nosotros queríamos, así que como ya había cumplido mis 18 años y ya era mayor de edad me fui de casa y Quil me pasó su departamento, ahí pretendía vivir en paz con mi Edward, pero él tenía otros planes y definitivamente me dejó en estado de shock, creo que aún no lo he perdonado del todo y ese es el motivo por el cual nos separamos, él no quería arrancarme de mi casa, él quería que solucionara mis problemas con mis padres, según decía yo estaba muy lastimada y debía curarme para estar realmente bien y enfocarme en una relación seria con él.


Indudablemente discutimos, no aceptaba que él me dejara de esa manera, lo necesitaba y él decía que yo necesitaba tiempo y espacio para pensar bien mis sentimientos hacia él, quién mierda se creía para decirme que yo no estaba segura de lo que sentía hacia él, yo mejor que nadie sabía que lo amaba y pensaba que él también lo tenía claro, pero nuevamente me equivocaba y ahora definitivamente pensaba que eran puras excusas de él, quizás fue él el que se dio cuenta de que no me amaba lo suficiente como me hacía pensar, quizás ya se había cansado de cargar con una chica con tantos problemas, estaba claramente decepcionada de su comportamiento, nuevamente estaba sola, él me había dejado cuando más lo necesitaba y jamás lo perdonaría, qué mierda me importa que me haya ofrecido su puta amistad mientras pasaba la tormenta que era mi vida, que se joda y se lo hice saber al estilo fiera

- Maldito hijo de puta, me cagaste la vida cabrón, pensé que me amabas – grité dándole un puñetazo en la cara, mierda su perfecta cara


- Bella, por favor escucha lo que tengo que decir, te amo, pero quiero que arregles tus cosas tranquila con tus padres, no estás bien, pienso que deberían ir al sicólogo y sanar bien sus heridas y reproches, si quieres te seguiré apoyando, pero como amigo, no quiero que el día de mañana despiertes y te des cuenta de que en verdad no me amabas y sólo sentías cariño y aprecio por mi, que en realidad nunca me amaste y confundiste tus sentimientos porque estabas mal en ese tiempo

- Crees que voy a creerte esa mierda, me conozco lo suficientemente bien para saber que te amo, nunca, escucha bien nunca te hubiera contado mis cosas si no te amara, a mis amigos jamás les dije, sólo a ti te lo dije, pero ahora me doy cuenta de que todo fue un error, nunca me quisiste, sólo me tenías lástima, eres un cabrón y puedes meterte tu puta amistad por donde te quepa, no te necesito, esto se terminó en este instante, no me vuelvas a hablar, no me vuelvas a mirar, no quiero saber nada más de ti, nunca, nunca, no sabes el daño que me estás causando, pero te juro que nunca más te voy a molestar, adiós profesor


- Bella no, tienes que entender mi postura, yo te amo mi ángel, pero quiero que estés segura, que no tengas dudas

- Me ves acaso con cara de dudas, me ves insegura, no, no respondas, ya no vale la pena

Y me largué, si me fui, él había dejado las cosas claras, siempre sería la niñita mimada para él, la pendejita con problemas y traumas. Estaba destrozada, me fui al departamento de Quil y no paré de llorar en horas, estaba realmente exhausta de tanto sufrir, siempre al límite de mis fuerzas, ya no tenía fuerzas para nada, no quería sentir nada, quería dejar de amarlo como lo hacía, mierda el dolor en el pecho era cada vez mayor, ese vacío que me dejó en el corazón era lo único que me indicaba que seguía viva.

Los días pasaron, las semanas y seguía vacía, seguía sufriendo su ausencia, las noches eran igualmente largas, casi no dormía y todas las jodidas noches soñaba con él, con su olor, su sonrisa, su cuerpo amoldándose perfectamente al mío. En el colegio las cosas iban de mal en peor, seguía siendo la primera en todo, pero cuando tenía que asistir a sus clases me bloqueaba, me dolía verlo tan imperturbable, tan majestuoso, casi parecía que lo que habíamos vivido era tan sólo un sueño producto de mi imaginación ya que nunca dio muestras de sufrir, de sentir la misma soledad que yo estaba sintiendo y lo odiaba por eso, me había mentido, me había engañado, pero en algo tenía razón, debía mejorar, debía sanarme, me costó admitir esto, pero con el pasar de las semanas y con mi amistad afianzada con Tone logré entender o más bien dicho Tone me convenció de que era lo correcto, debía volverme a conocer, conectarme nuevamente a algo, sentirme viva nuevamente y salir victoriosa de mi nuevo descubrimiento. Con Tone las cosas eran sencillas, ya le había contado todo lo que me había pasado y nunca me miró con lástima y eso lo agradecí enormemente, nunca me trató como loca o como si estuviera rota, siempre fue él mismo, me hacía reír de tantas tonteras que hablaba, pasábamos mucho tiempo juntos, me visitaba a diario y mis padres lo adoraban, por cierto había vuelto a vivir con ellos, había decidido mejorar las relaciones con ellos, además asistiríamos juntos a las terapias, lo malo de volver a casa es que mis padres le habían pedido o casi rogado a Edward de que no abandonara la casa, él no estaba muy de acuerdo, se que era por mi, así que lo más cínicamente posible le dije que a mi no me importaba, que hiciera lo que quisiera, yo no iba a interferir con su vida, en ese mismo momento en que lo dije pude ver un rastro de dolor cruzar por sus hermosos ojos mezclado con anhelo, deseo y amor, pero me hice la desentendida y me largué a mi dormitorio.


Ya quedaba poco para la finalización del año escolar y con Tone habíamos descubierto algo en que ocupar nuestro tiempo, un día de ocio íbamos caminando cuando nos encontramos con un panfleto de una casa de acogida para niños huérfanos de escasos recursos y pedían voluntarios y socios para los niños, así que nos presentamos y el escenario era desolador, habían muchos niños y las instalaciones eran mediocres, así que nos ofrecimos como voluntarios para lo que se necesitara y además ofrecimos un dinero mensual para el albergue, el director estaba maravillado con nuestro entusiasmo y en pocas horas los niños me robaron el corazón, eran tan tiernos e inocentes y al pasar los días iban llenando ese vacío con su amor, ellos me amaban y yo a ellos, eran tan maravillosos que sólo podía sonreír como idiota todo el día, apenas terminaban las clases Tone me iba a buscar y nos íbamos todo el resto del día a jugar con los niños, los quería a todos, pero interiormente tenía mi favorito, se llamaba Benjamín, era un niñito muy lindo de mejillas rosaditas y ojitos verdes, a pesar de ser un niño de 4 añitos tenía muy mal genio, pero a mi me hacía reír mucho, era muy posesivo conmigo y no le gustaba que otros niños me abrazaran y simplemente me encantaba ese niño, se había robado mi corazón.

En casa las cosas cada vez iban un poco mejor, pero me empezaron a fastidiar por llegar tarde y tan exhausta, pero a mi no me importaba, los niños valían la pena, no les había dicho a nadie en casa de mi nueva labor, era algo mío, tan personal, algo muy íntimo y no quería compartirlo, no ahora. Mi madre se quejaba de mis manos raspadas o de algunos de los moretones que presentaban mis piernas, la verdad es que en el hogar habían muchas cosas que hacer aparte de jugar con los niños, así que prestaba mi ayuda en lo que se necesitase y eso incluía hacer aseo, arreglar algunas instalaciones, pintar, bañar a los niños incluso a veces ayudar en la cocina, con tantas cosas y el poco tiempo que a veces tenía para realizarlas casi pasaba en el suelo, siempre me estaba cayendo, claro que los niños estaban encantados con mi recién estrenada torpeza y reían hasta cansarse o hasta que Benjamín se enojaba y los miraba con cara de querer matarlos por reírse de mi, joder ese niño cuando crezca sería tan buena persona, tan protector, tan caballero, tan….mierda tan Edward para sus cosas, joder de nuevo pensando en él, la verdad es que cada día que pasaba lo amaba más, si, lo se, soy una tonta, pero contra el amor se puede luchar, pero no ganar. En varias ocasiones cuando llegaba a casa tarde en la noche lo veía sentado en el living viendo televisión o en el comedor revisando pruebas para el colegio, siempre me miraba con cara de sospecha y como queriendo preguntarme algo, pero desistía y no abría la boca.


Cuando Quil me preguntó a que se debía mi notable felicidad no me quedó de otra que contarle, a él no lo podía engañar, además necesitábamos más manos y mi amigo era perfecto para desempeñarse en el hogar, cada día que pasaba más jóvenes se iban uniendo al voluntariado y el hogar estaba mejor que nunca, habían llegado también aportes de varias empresas y personas anónimas y ahora se estaba mudando a unas instalaciones más grandes y más adecuadas para los niños.

Diciembre ya había llegado y quedaban pocos días de clases y la pronta inauguración del nuevo hogar también estaba llegando. La relación con Edward estaba algo mejor, por lo menos ahora hablábamos, no mucho pero algo es algo, me preguntaba como estaba y yo le decía : feliz porque así me sentía. En el hogar habían pedido a los voluntarios que para navidad si cada uno podía llevar un niño a nuestro hogar para darles una navidad en familia y me pareció una idea maravillosa, así que yo llevaría a Benjamín a mi casa, así que cuando terminaron oficialmente las clases y se llevó a cabo la graduación estaba expectante, Tone fue a verme graduada y me llevó una enorme sorpresa, había pedido permiso en el hogar y llevó a Benjamín a mi graduación. Como era la mejor alumna de la promoción me tocó hacer el discurso de apertura y cuando lo estaba dando vi entrar a Tone con Benjamín en los brazos y no pude evitar emocionarme y las lágrimas cayeron en forma automática, mi pequeño Benjamín llevaba un ramo de margaritas en su regazo y se veía tan hermoso mi niño. Cuando entregaron los diplomas no podía despegar los ojos de mi niño y mis padres que estaban en primera fila al igual que Edward desviaron la mirada para poder enfocarse en lo que yo tanto miraba, a primera vista vieron a Tone, y los ojos de Edward se entristecieron, en cambio mis padres sabían que con Tone éramos solamente amigos y se veían intrigados por la presencia del pequeño niño que no conocían, cuando el acto acabó Tone puso en el suelo a mi pequeño que no dudó un segundo y corrió a mis brazos que lo esperaban ansiosos, me besó sonoramente en la mejilla y me regaló las flores que me llevaba, fue un momento maravilloso y con él en brazos me puse a dar vueltas y vueltas, mi pequeño reía extasiado, nunca lo había visto tan contento, cuando mis padres se acercaron se los presenté como mi pequeño amigo y mi sol, ellos se miraron de reojo por mi actitud y Edward estaba ¿raro?, nunca le había visto esa mirada y también se acercó a saludarnos, Benjamín lo miraba con desconfianza, ¿ya les había dicho que mi pequeño era territorial? Pues ahí demostró su poderío, cada vez que Edward trataba de decirme algo Benjamín se interponía y llamaba mi atención, pero me dejó en total shock fue cuando me susurró que ese señor de ojos verdes me miraba con amor y que a él no le agradaba, sólo atiné a besarlo en la mejilla, no quería cavilar nuevamente en esa posibilidad, eso era tema muerto, él no me amaba, lo había dejado bien claro.


EDWARD POV

Me estaba muriendo lentamente en la agonía, mi Bella me detestaba nuevamente y esta vez la culpa era exclusivamente mía, tenía que reconocer que la había cagado nuevamente, pero ella estaba tan mal y tenía un miedo enorme que pasara el tiempo y ella se diera cuenta de que no me amaba, que se había confundido por los problemas que tenía en este momento, cobarde, maricón, poco hombre, eran algunos de los apelativos que merecía que ella me gritara cada hora del día, pero ella se cerró nuevamente, cada día la veía más apagada y distante y yo era un maldito muerto viviente, sufría cada segundo del día, la extrañaba horrores, casi todas las noches lloraba la pérdida de la única mujer que me robó el corazón.


Cuando las semanas empezaron a pasar quería hablar con Bella y decirle que olvidara todo lo que había dicho, estaba arrepentido de mis mierdas de palabras, pero algo cambió, era ella, de un día para otro ella cambió, se veía feliz, radiante, cada vez más hermosa, una sonrisa siempre acompañaba su hermosa cara y ¡joder! Yo no era el causante de esa alegría, mierda, mierda, mierda, seguramente era ese Anthony con el cual salía a diario, lo sabía muy bien porque había aceptado quedarme en casa de Bella solamente para estar cerca de ella, pero me hacía cada vez más daño, se juntaban todos los días y empezó a llegar tarde y cansada en las noches, lo se porque siempre la esperaba con la excusa de ver televisión o de corregir exámenes, pero cuando iba a su dormitorio ella en cosa de segundos ya estaba profundamente dormida encima del cobertor y con la misma ropa con la que llegaba y yo sólo me podía preguntar ¿en qué mierda anda metida con ese pendejo?

Me torturaba con esa pregunta, quizás ya me olvidó y se refugió con ese idiota, claro, eran tan parecidos, sus gustos musicales, sus ropas, hasta sus jodidas edades eran más cercanas que la mía con ella, joder, ese pendejo me la estaba ganando y lo peor es que no estaba haciendo nada para recuperarla.


Cuando llegó la graduación ella tenía que dar el discurso y se veía jodidamente sexy, mierda cada día que pasaba la veía más mujer, estaba tan diferente, no se más madura, sólo podía verla e imaginármela encima mío montándome y jadeando por más placer, mierda, ahora estaba caliente y en público. Mientras daba su discurso algo en la lejanía la emocionó y sus lágrimas empezaron a bañar su rostro, qué mierda la emocionaría, no podía ver que enfocaba su mirada, cuando estaban recibiendo sus diplomas vi el motivo de su anhelo : Anthony, quien llevaba un niño en sus brazos ¿quién sería? Yo tenía entendido que él tenía una hermanita y lo más extraño es que ese niñito miraba a mi Bella con tanto amor y orgullo. Luego el niño se arrojó a los brazos de mi amor y dieron vueltas y vueltas, ella se veía tan jodidamente hermosa, con un toque maternal, porque era evidente que ella adoraba al niño y el sentimiento era mutuo y no pude evitar pensar cómo se vería ella cargando nuestro hijo o hija, mierda si hasta para casarme la quería, la necesitaba como una droga. Trataba de hablar con mi amor pero el niño llamado Benjamín siempre se interponía y llamaba su atención, si, lo se, es tremendamente malo que me sienta celoso de un niño, pero no lo podía evitar, yo quería hablar con ella para solucionar las cosas, quería tenerla nuevamente, que me quisiera como antes, que suspirara por mi, pero no pude decir nada, el niño no me dejaba ¡genial!

Navidad había llegado y Bella estaba más feliz que nunca, había comprado montones de regalos y se había dedicado exclusivamente a adornar el árbol y decorar toda la casa, también había ayudado a preparar la cena y había preparado los postres y las galletas, andaba por toda la casa cantando y saltando de felicidad, había dicho que esa noche tendría un invitado especial y yo me estaba muriendo de los celos, quizás iba a presentar a ese pendejo Anthony como su novio y juro que si eso pasaba lo mataba ahí mismo por arrebatarme a mi Bella.


Llegó la noche y todos estábamos esperando que llegara Bella con su invitado, así que cuando se abrió la puerta todos nos quedamos con la boca abierta, ella venía de la mano con Benjamín, el niño de la graduación y para ser sinceros se veía bien mono con su trajecito formal con corbata y todo, él miraba hacia todos lados impresionado y tomaba de la mano a Bella con nerviosismo

- familia, les presento a mi acompañante para esta noche, como saben se llama Benjamín y es alguien muy especial para mi


- bella, hija ¿de dónde conoces a este niño tan hermoso? La vez pasada no quisiste decir nada, pero es navidad debería estar con su familia – le dijo Charlie

- mmm, la verdad es que de eso quería hablarles yo…

- yo no tengo familia, soy huérfano y vivo en un hogar – aclaró Benjamín y todos quedamos conmocionados por la revelación, ese niño no tenía a nadie de su familia y era tan valiente al decir las cosas claramente – pero Bella aclaró lo que todos nos preguntábamos ¿por qué lo conoce?

- Bueno familia, a mi pequeño lo conocí porque desde hace tiempo que soy voluntaria en la casa hogar donde está Benjamín y ahí es donde paso casi todo el tiempo – mierda ¿podría ser más perfecta?


- Si, además ella ayuda en todo, hace aseo, a veces cocina y también nos cuida a todos los niños, pero más a mi, porque soy el regalón ¿cierto Bells?

- Si mi vida, pero eso es un secreto, no queremos que los demás niños se sientan mal ¿cierto?


- Cierto, pero todos saben que me quieres más a mi – dijo el pequeño con orgullo y ella lo miraba con adoración

- Hija estamos tan orgullosos de ti, jamás pensamos que tendrías vocación para el servicio social


- Gracias mamá, la verdad es que yo tampoco y ha sido maravilloso, Tone y Quil también son voluntarios y al igual que todos los jóvenes que ayudamos nos hemos llevado un niño para que compartan una navidad en familia y he aquí mi tesoro

Después de la cena Bella llevó al niño a una habitación que había preparado especialmente para él, estaba gratamente asombrado, ella la había acondicionado para un niño de su edad y por lo que veía no sería la primera visita del niño, ya que se adoraban mutuamente y la pieza tenía un cartel en la puerta con el nombre del pequeño.


En la mañana los gritos de júbilo y movimiento en mi cama me despertaron, al abrir mis ojos estaba Benjamín y Bella saltando en mi cama riendo y gritando para que me levantara a abrir los regalos, no me cabía más dicha, ellos me incluían en su mundo, ella me consideraba nuevamente, así que me levanté rápidamente para bajar hasta el árbol, cuando íbamos bajando la escalera el niño tomó mi mano y me detuvo, Bella se dirigió a la cocina así que no se dio cuenta que nosotros nos habíamos detenido.

- oye, tú eres el príncipe de Bells
- ¿por qué me preguntas eso?
- Bueno, es que ella en el hogar nos contó un cuento, de esos de princesas, pero era extraño, porque no habían princesas

- ¿cómo?


- Si, no habían princesas, había una chica que era un ángel y estaba enamorada de un príncipe llamado Edward, pero el ángel lloraba porque los príncipes no amaban a los ángeles, sino a las princesas, no entendí mucho, pero Bells dijo que a veces las historias no tienen que ser como en los cuentos de hadas, todos felices y contentos sino que habían distintos tipos de amor y felicidad, por ejemplo ella dijo que había tenido una hermanita que se había ido al cielo al igual que mis papás, pero que el destino nos había llevado a conocernos y ahora seríamos felices, que formaríamos una nueva familia que no era como la primera, pero sería igualmente querido – mierda el niño me había desarmado y que decir de mi Bella, cada día más hermosa, su corazón estaba completamente descubierto y era maravillosa

- Ella tiene razón, pero hay algo en lo que se equivoca, el príncipe siempre ha querido al ángel, sólo que fue un tonto y ahora quiere pedirle perdón

- Entonces ¿por qué no te apuras? ¿crees que te va a esperar por siempre? Puaj, los adultos son tan complicados, si ella fuera más chica ya sería mi novia y ya no lloraría por ti, pero te advierto si la haces tu novia no quiero verla llorar más por tu culpa, y aunque soy pequeño igual te puedo dar una golpiza, total Bells me enseñó


- Jajajaja, tienes razón pequeño, ella golpea fuerte, a mi me ha golpeado y duele bastante, pero la recuperaré y no la haré llorar nunca más

- Más te vale, ahora vamos – joder ese niño tenía una personalidad asombrosa, me puso en mi lugar y más encima me amenazó jajaja, ese niño sería el hijo ideal de mi fiera y mío.

Después de la entrega de los regalos, que casi todos eran para Benjamín el día pasó entre risas y anécdotas, pero yo no estaba muy tranquilo, el regalo para Bella lo llevaba aún en mi bolsillo, se que era presumido y arrogante esperar que ella lo aceptara después de todo lo que le hice, pero debía arriesgarme por ella, luchar por su perdón y su amor, ya había hablado con sus padres y tenía el consentimiento pleno, además era el momento preciso para pedírselo


BELLA POV

El día era maravilloso, todo estaba perfecto, bueno no tanto, pero había decidido a hablar nuevamente con Edward y ver si algo podía rescatar de su amor, si no me amaba, bueno, tendría que salir adelante, pero por lo menos tendría la certeza de sus sentimientos, ya que desde hace varios días me miraba de una manera tan…, no se, tan especial y eso me puso a pensar que siempre veía amor en sus ojos cuando me miraba, aunque a veces trataba de esconderlo no lo lograba del todo, así que quería salir de dudas porque yo lo amaba ahora más que antes, me sentía más libre, madura y con fuerzas renovadas para luchar por nuestro amor, si es que aún él me amaba.

- Bella, yo quería decirte que me arrepiento enormemente haberte herido y gustoso me pasaría la vida entera corrigiendo ese error, se que no soy el príncipe de tus sueños y tú tampoco eres mi princesa, porque eres el ángel que alumbra mis días y un ángel es más hermoso y más importante que una tonta princesa – no, no, no, él se está declarando delante de toda la familia, mierda me está poniendo nerviosa, miro a mis padres y ellos están felices, al igual que Sue y Billy, miro a mi pequeño Benjamín y joder, también está feliz y aplaudiendo vigorosamente


- Se que nuestra relación no empezó de la manera convencional y agradezco cada día por ello, antes mi vida no tenía significado y era monótona, por eso es que acepté venir al otro lado del mundo, porque nada me llenaba, siempre había sentido un vacío en mi alma que nada llenaba, pero cuando te conocí sentí por primera vez la felicidad, entre peleas, besos y más peleas descubrí a la mujer maravillosa que eres, esa que estaba hecha a la medida para mi, esa que me llenaba de luz y felicidad, esa que luchaba encarecidamente para alejarme de su lado por miedo a enamorarse y yo luchaba cada día para poder acercarme un poquito más a su corazón, esa niña mujer que me enseñó a amar, a llorar, a luchar por lo que se quiere, a vencer los obstáculos y superar lo malo que tiene la vida y rescatar lo hermoso que esta misma entrega. Bella eres mi ángel, mi vida y mi futuro y nada me haría más feliz en esta vida que aceptaras a este hombre que se muere de amor por ti, éste que está hecho sólo para ti, que tiene ojos sólo para una mujer, mi mujer, mi niña, mi diosa, mi todo, me aceptas Bella nuevamente en tu vida, pero como mi mujer, mi compañera, mi amiga, mi amante, MI ESPOSA – carajo veía todo nublado por mis lágrimas, no se en que parte de su declaración se había arrodillado y ponía frente a mi la cajita con el anillo

- S..si, Edward Acepto todo, todo – y no pude hablar más porque la emoción me embargaba y me arrojé a sus brazos como una loca y caímos juntos abrazados en el pasto del jardín en donde nos hallábamos, entre besos y abrazos me puso el anillo, era realmente hermoso y según dijo ese anillo era de su madre y había pasado de generación en generación por las mujeres de los Cullen y ahora era mi turno.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

oooooooooooh que genial pobre bella esque cuando uno ama alguien solo quiere estar cerca hahahah qe genial me encanto el capi

Angie P.S dijo...

me encanto el capitulo, y lo hermoso de la propuesta de matrimonio de Edward