Dark Chat

lunes, 16 de agosto de 2010

Te Presento A Mi Amante

Hello mis angeles hermosos aqui les dejo el segundo capitulo , de este candente fic , por fiss dejen sus comentarios al final.
Mil besitos
Angel of the dark
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Capitulo 2: Nuevos y Viejos Amigos



Edward POV

No se por que, pero después de haberla visto sonrojar en el estacionamiento quise verla de la misma forma y lo logre al sorprenderla distraída y llamarla la atención. Quizás fui un poco duro al decirle que la próxima la sacaría de la clase, cosa que no haría, no podía prescindir de su presencia ¿Por qué? No lo se.


Di por terminada la clase y me senté en la silla frente a mi escritorio mientras disimuladamente la veía tomar su cosas y guardarlas en su mochila, para salir del salón tenia que pasar frente a mi y cuando lo hizo le sonreí de una manera que según Alice hacia derretir a cualquier mujer. Note un leve sonrojo de nuevo y siguió caminando.


Me levante para sentarme de nuevo, esta vez en el escritorio y la llame.


—Señorita Swan, tenemos que hablar.


Se giro y note en sus ojos vergüenza y algo mas que no pude distinguir.


— ¿Te habrás dado cuenta que lo de esta mañana estuvo mal? —con el salón vació me tome la libertad de tutearla.


—S… si —contesto bajando la mirada al suelo— pero yo no sabia que tu eras… que usted era maestro


— ¿Y así eres de grosera con todas las personas que no son docentes?


—No, lo de esta mañana… es que… —nerviosa se miraba aun mas linda— tu… agh… su forma de conducir me puso nerviosa y cuando me caí —ahí estaba de nuevo el rubor— pensé que se estaba burlando y entonces…


—Esta bien —la interrumpí, no quería hacérselo mas difícil— yo debí decirte que seria tu maestro.


— ¡Claro, pero preferiste que pasara la peor vergüenza de mi vida insultando a un maestro! —me miro con un dejo de rabia en sus ojos.


—Hagamos un trato —ok, me acababa de gritar de nuevo y de tutearme, ¿pero acaso me importaba?— empecemos de cero señorita Swan, haré de cuenta que lo de esta mañana no paso.


— ¿No habrá castigo? —pregunto sorprendida


— No, pero si vuelves a gritarme de esa forma entonces si lo habrá ¿hecho?


—Ahm… si bueno, entonces, no pensaba hacerlo pero… entonces te… le ofrezco una disculpa por haberte… haberle dicho que su manera de conducir era estúpida… aunque lo sea… digo…


Reí por su nerviosismo.


—Así déjalo Swan, ve a tu próxima clase, no quiero que llegues tarde.


—Gracias… con permiso.


Giro sobre sus talones aun con la vista hacia el suelo, lo cual me privo de ver sus ojos, pero aun así la confusión y la pena bailaban en el aire. Salio del salón casi corriendo lo cual la hizo tropezarse con una de las patas de la mesa junto a la puerta, haciéndola caer de rodillas. Corrí hasta su lado para ayudarla a levantarse. Pero cuando llegue ya estaba de pie, así que tome su mochila.


— ¿Te encuentras bien?


—Si, esto es muy común en mi día a día —levanto la mirada para toparse con la mía y se sonrojo de nuevo, vaya que lo hacia constantemente— me voy a clases


—Tu mochila…


—Ah si, adiós.


Me quito la mochila de las manos y camino con precaución, la seguí con la mirada hasta que la perdí entre la multitud. Escuche el aviso de nuevo mensaje en mi celular, me acerque al escritorio para tomar mis cosas y leí el mensaje.


Amor mío es una lastima que no estés aquí, todo es hermoso por eso te aviso que me quedare un par de semanas mas, llego a principios de septiembre te amo.


Tanya


Demonios. Ahora no serian dos semanas sin mi esposa, seria un largo mes en el que Alice no dejaría de insultarla y además sin poder verla.


Bella POV


Estúpido profesor con cara de ángel. Ok, no me puso ningún castigo, el cual tampoco me merecía, pero ha hecho que me sonroje más de tres veces en menos de dos horas. ¿Qué me pasaba? Sentía el corazón palpitando a velocidad inusual, como si quisiera salir de mi pecho.


Me dirigí al baño a mojarme un poco la cara para ver si así bajaba un poco el sonrojo que ahora parecía permanente gracias a Edward… no, tenia que ser un poco mas educada… al profesor Cullen, si, eso. Era increíble, en mis años en el instituto jamás supe como se llamaba el señor Barner, es mas apenas recordaba como se llamaba Newton, pero con Edward fue distinto. Dijo su nombre y este entro para quedarse en mi consiente y subconsciente.


El baño estaba vació, seguro la siguiente clase ya había empezado, así que si iba a llegar tarde por que no tomarme unos segundos mas. Deje mi mochila y fui hacia el lavabo, deje que el agua fría casi helada tocara mis manos y después la lleve a mi rostro, repetí lo mismo unas dos o tres veces mas. Cuando abrí los ojos una chica me extendía algunas toallas de papel, tenía una sonrisa de duendecillo en sus labios y me miraba a través del espejo.


—Gracias.


—De nada —me dedico una sonrisa aun más grande, su voz era dulce y parecía estar cantando en vez de hablar.


—Eh… ¿eres nueva? —no es que conociera por nombre y apellido a los 357 alumnos del instituto, pero un rostro como el de ella, tan perfecto y suave, sus ojos verdes y esa sonrisa traviesa seria fácil de recordar, sin contar con el cabello corto cuyas puntas apuntaban en diferentes direcciones.


—Si y no, acabo de llegar a Italia, pero nací aquí en Forks, soy Alice Cullen — me extendió la mano manteniendo la misma sonrisa la cual le devolví mientras le daba la mano. Un momento… ¿Cullen?


— ¿Eres algo de Ed… del profesor Cullen?


—Oh si, es mi hermano mayor, ¿ya lo conociste?


—Si, acabo de tener clase con el, tienen los mismos ojos —el mismo color verde, aunque Edward tenia una mirada mas fuerte e impactante.


—Si, el mismo color, pero los míos son más lindos —su melódica risa invadió el baño


—Bueno Alice ha sido un gusto pero tengo que ir a clase…


—Oh si, yo también pero no encuentro el salón de Español


—Yo también voy a Español, si quieres podemos buscar juntas por que yo tampoco se donde esta


—Si —chillo— no se por que pero creo que tu y yo seremos grandes amigas, por cierto ¿Cómo te llamas?


—Ah si, me llamo Isabella Swan, pero Bella esta bien.


— ¿Bella? Le haces honor a tu nombre, eres muy linda


—No, no creo —me sonroje y tome mis cosas y salimos del baño.


— ¿No crees que eres bonita?


— ¿Qué carrera estudias? —evadí su pregunta con otra, no me gustaba hablar de mi físico, no era algo discutible, ¿Cómo me iba a ver bonita caminando junto a alguien como Alice?


—Diseño de modas, me encanta todo lo que tenga que ver con ropa, zapatos, accesorios, vestir y desvestir, ahm desvestir en el buen sentido de la palabra —se río y yo junto con ella ante su aclaración, parecía demasiado fácil hablar con ella— ¿y tu?


—Literatura, quiero ser escritora


—Oh fantástico, ¿has escrito algo?


—No —mentí— pero tengo muchas ideas, y tal vez me anime ahora que de lleno estudiare lo que me gusta.


—Eso me gusta, tener una amiga escritora —me sonrió con sinceridad, era distinto, cuando conocí a Angela me resulto algo difícil entablar una amistad puesto que ella era tímida y yo también, con Jessica, bueno ella no era una amiga, era mas una compañera, pero con Alice la palabras fluían, al igual que las sonrisas sinceras, me agradaba.


—Creo que es este —señale la puerta del salón y Alice la abrió, espere encontrarme con algún maestro con cara de disgusto por el retraso de mas de 15 minutos, y ya tenia bastante con maestros molestos por el día de hoy, en vez de eso encontramos el salón lleno de murmullos y sin profesor.


—Parece que no ha llegado, tuvimos suerte, allá hay dos asientos, ven.


Seguí a Alice pero mi mirada se detuvo en un chico rubio y musculoso sentado en una esquina del salón leyendo un libro aparentemente sobre la Guerra fría. No podía ser el, ¿o si? Deje mis cosas junto al asiento de Alice y camine hasta ese chico.


— ¿Jasper? —lo llame y alzo su mirada para encontrarse con la mía, era el, me sonrió y dejo su libro para levantarse entonces lo abrace— ¡Jasper! ¿Qué haces aquí?


—Nos acabamos de mudar Bella, hace apenas unos días


— ¿Y no me avisaron? —le fruncí el ceño aparentando estar enojada, cosa que con el era imposible.


—No, bueno es que llegamos apenas ayer y Rosalie quería darte una sorpresa, íbamos a ir a tu casa al terminar la escuela.


— ¡O no importa, vaya que me han dado una sorpresa! —me lancé para abrazarlo de nuevo.


Jasper y Rosalie eran hermanos gemelos, los conocí en Phoenix desde el jardín de niños y desde entonces éramos inseparables. Rosalie era esa amiga con la que podías hablar de todo y siempre te escuchaba, además podía confesarle un asesinato y estar segura de que el secreto estaría bien guardado. Jasper era ese amigo protector, el cual me ahuyento varios pretendientes y hasta ahora no me canso de agradecerle. También era bueno escuchando mis problemas y demás, siempre con un buen consejo que dar. Sin embargo cuando mamá murió y me mude a Forks los deje atrás, junto con el sol.


Alice se aclaro la garganta para llamar la atención. Vi como le dirigía una mirada curiosa a Jasper pero también la alegría brillaba en sus ojos, el la miraba de la misma forma.


—Lo siento, Jasper ella es Alice Cullen, Alice el es Jasper Hale, mi mejor amigo —sonreí ante mi presentación pero ninguno de los dos me prestaba atención. Parecían elevarse en su propia nube.


—Me has hecho esperar mucho tiempo —escuche decir a Alice con una voz llena de dulzura y a la vez de reproche.


—Lo siento señorita —respondió Jasper y entonces yo no entendía nada.


— ¿Se conocen? —pregunte confundida


—No —contesto Alice— pero tenemos mucho tiempo para hacerlo.


Jasper le sonrió con una alegría sin igual, parecía estar viendo el sol por primera vez. Extendió su mano para tocar la de Alice mientras no despegaban la mirada uno del otro.


—No deberías decir que soy tu mejor amigo Bella. ¿Qué dirá Jacob? —pregunto Jasper rompiendo contacto visual con Alice, mas no el físico, baje la mirada y me mordí el labio inferior.


—Hace meses que no veo a Jake —conteste


—Eso si es una sorpresa. ¿Qué paso? —aunque Jasper no lo conocía en persona, por medio de mensajes el y Rosalie sabían que Jacob era mi mejor amigo en Forks.


—Me… me confeso… —me sonroje, pero a pesar de que miraba hacia el suelo Jasper pareció notarlo.


—Ah entiendo, ¿y tu no sientes lo mismo por el? —definitivamente Jasper me conocía muy bien— después de todo hablabas maravillas de el.


—Si, maravillas como amigo, como algo mas no, y el prefirió alejarse y creo que fue lo mejor, aunque lo extraño —mis ojos se llenaron de lagrimas al recordar a mi mejor amigo, sin embargo no las deja salir, sentí una mano delgada que subió mi rostro.


—No te preocupes, el encontrara a la mujer indicada y no eres tu, mientras que tu hallarás a tu príncipe azul pronto, así como yo encontré al mío —entonces Alice miro a Jasper.


—No creo que eso ocurra pronto —proteste.


—Nunca apuestes contra mí, el amor llega cuando menos lo esperas.


Esto me parecía realmente extraño, como habían cruzado un par de palabras las cuales sigo sin entender y de pronto era su príncipe azul y Jasper no la contradecía, al contrario, con esa sonrisa parecía estar de acuerdo con ella en todo.


La profesora de español no se presento, así que tuvimos lo que restaba de la hora para ponernos al día entre Jasper y yo, y además conocer mejor a Alice. Se notaba por que quería estudiar diseño de modas, su pasatiempo favorito era salir de compras, también supe que vestía a su mamá y a veces a su hermano, el único que se rebelaba ante sus experimentos con la ropa era su papá.


Jasper estudiaría psicología, y claro eso se le notaba desde que teníamos 5 años. Por muy raro que parezca, el y Alice jamás se soltaron la mano y esas miradas que se echaban realmente me ponían nerviosa. Al parecer me había perdido de algo.


Seguimos con nuestras clases quedando para comer juntos lo cual sucedió sin encontrarme siquiera con Rosalie, revise mesa por mesa la cafetería y ni rastro de mi hermosa y rubia amiga. Jasper le mando varios mensajes de texto pero tampoco respondió.


Continuamos con nuestras clases, pero yo seguía pensando en el extraño comportamiento de mis amigos y por que no… también pensaba en mi nuevo profesor de literatura, se había portado muy bien conmigo, cualquier otro me habría castigado, pero el no, al contrario se había portado amable y tan solo recordar sus ojos y esa sonrisa torcida me volví a sonrojar mientras suspiraba fuertemente lo que hizo que todo el salón me mirara, incluso la maestra.


Edward POV


Al terminar con mi ultima clase, tome mis cosas y fui hasta mi amado Volvo. Esta vez junto al Jeep estaba el mismo chico corpulento de esta mañana, sin embargo mientras me acercaba note que me parecía conocido.


— ¿Edward? —pregunto y entonces lo reconocí, era Emmett Swan, mi compañero de cuarto en la universidad de Darmouth—. ¡Eddie eres tu!


—Emmett, nos vemos después de algunos años y lo primero que haces es llamarme así —le conteste fríamente, odiaba esa maldita abreviación de mi nombre.


— Oh vamos, era solo para comprobar que eras tu —se río de una forma que seguro todo el campus lo había escuchado— mira donde te vine a encontrar, ¿Qué haces aquí?


—Soy maestro de literatura


— ¿En serio? Yo soy el entrenador de fútbol, ¿se nota? —dijo mientras alzaba los brazos alardeando de sus musculosos, rodé los ojos—. ¿Envidia?


—Seguro…


—Edward…


La voz de mi hermana me interrumpió, venia acompañada de otras tres personas, una de ellas la chica de esta mañana de la cual solo conocía el apellido… Swan. Entonces todo encajo, esta mañana ella había bajado del Jeep al igual que Emmett, y ambos se apellidaban Swan, esa chica era la hermana menor de la cual Emmett siempre presumía.


Los otros dos, caminaban a su lado, la chica le tenía un brazo alrededor de los hombros y el chico junto a mi hermana de la mano de ella. Un momento… ¿venia de la mano de mi hermana?


—Decidí que mejor si me voy contigo hermanito —hablo Alice quien se dio cuenta de que miraba su mano entrelazada con la de ese chico y rápidamente la soltó— he invitado a comer a mis dos nuevas amigas y a… Jasper.


Note como mi hermana se ruborizaba un poco al mencionar al rubio.


—Entonces tu nos guías a casa —Alice siguió hablando como si nada— mira el es Jasper Hale, y ellas don Rosalie Hale, hermana de Jasper y Bella Swan.


— ¡Enana! Por fin apareces, tengo hambre y tu no te dejas ver, pensé que algún alumno te había pisado —estallo en carcajadas mientras Bella «quien tenia un nombre hermoso como ella» lo miraba molesta.


— ¿Tienes que llamarme así enfrente de todos?


—No tiene caso llamarte de otra forma, todos saben que eres bajita, o puedo pensar algunos apodos nuevos para tus otros defectos, como distraída, o tus dos pies izquierdos.


— ¡Basta Emmett! —grito Bella roja del coraje.


—Ok, Edward te presento a mi hermana consentida Isabella.


—Soy la única hermana, y además… —titubeo un poco, se acerco a su hermano y me miro para bajar la vista de nuevo al piso mordiéndose el labio— ya conozco a Ed… al profesor Cullen. Pero tú ¿de donde lo conoces?


—Estudiamos juntos la universidad —conteste yo.


—Perfecto —chillo mi hermana a mi lado— entonces ya que todos nos conocemos por que no nos vamos a comer.


—Rose y yo te seguimos en mi auto.


—Si, allá nos vemos —mi hermana le guiño un ojo al rubio, esto empezaba a desagradarme.


—Bien, ya que insistes pequeño duende, vamos a comer, espero que tengas bastante comida.


—Y lo dice en serio, come como oso en engorda —confesé recordando la capacidad para alimentarse de mi amigo.


—Me llamaste duende… —Alice golpeaba el suelo con un pie— ¡me gusta!


Y empezaron los saltitos característicos del entusiasmo de mi hermana, yo rodé lo ojos.


—Me agrada tu amiga enana.


—Te la cambio —dije sin pensar lo que mis palabras significaban.


—Trato hecho —Emmett abrazo por los hombros a mi hermana y literalmente me aventó a su hermana, la cual sostuve con un brazo por la cintura y la otra sobre su mano. En ese instante sentí una corriente eléctrica por todo el cuerpo y ella retiro la mano inmediatamente, pero yo no quite la mano de su cintura.


—Lo siento —murmure


—Es… esta bien… —contesto ella sonrojándose de nuevo.


—Te tomas muy a pecho las cosas ¿no? —pregunto Emmett quien retiro mi mano de la pequeña cintura de su hermana.


—Nunca apuestes contra mi Bella —le dijo mi hermana a Bella mientras se reía y me guiñaba un ojo, no entendí lo que quiso decir pero Bella se sonrojo mas, para después subirse al Jeep ayudada por su hermano.


Alice y yo subimos al Volvo, para conducir a casa.


— ¿Qué fue eso eh? —pregunte


— ¿A que te refieres? — me sonrió con aire inocente.


—Ah… a eso de… —titubeé, no podía decirle que me refería a Bella, entonces no me la quitaría de encima con sus preguntas— venias de la mano de ese chico


—Ah, nada, solo es el amor de mi vida.


Despegue la mirada del camino para mirarla, ella se encogió de hombros, encendió la radio y comenzó a cantar, dando por terminada la conversación. Definitivamente mi hermana estaba loca. Muy loca.



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